El divorcio de Madonna paraliza la adopción de una niña

Las cosas se complican cada vez más para la cantante Madonna. Y es que, según las últimas informaciones, su divorcio del director británico Guy Ritchie podría ser motivo más que suficiente para negarle la adopción de Mercy James, una niña malawi de apenas 2 años a la que esperaba poder adoptar. Las autoridades del país no están a favor las adopciones de personas  solteras y, mucho menos, de parejas divorciadas recientemente.

 

Así lo ha manifestado en declaraciones a la revista Grazia, Penston Kilembe, director del Servicio de Protección de la Infancia del país africano. “Uno de los motivos fundamentales para poder adoptar es la estabilidad que da  una familia. No es justo que el niño vaya a una pareja rota o que se encuentre en proceso de ruptura”, explicó.

 Algo que complica bastante las posibilidades de la actriz, quien ya tuvo que lidiar con los familiares de la menor. La actriz se decantó por la pequeña en el mes de octubre de 2006 tras visitar el orfanato Kondanani, situado en Blantyrone. Y, aunque el año pasado tenía los papeles arreglados, todavía no había tenía la ocasión de llevársela a casa. Dudamos si ahora va ser posible.

Esta no es la primera vez que la cantante tiene dificultades para poder adaptar. En 2005 obtuvo la custodia legal de David Banda que en la actualidad tiene tres años. Su adopción fue realmente polémica. Madonna obtuvo un permiso especial de las autoridades para poder hacerse con el niño, pues tal derecho estaba vetado a los extranjeros. Además se pudo asistir a un cruce de acusaciones entre el padre biológico de la criatura (su madre murió nada más dar a luz) y Madonna. Según ella, el padre rechazó la ayuda que esta le ofreció para que se ocupara del niño sin necesidad de que éste abandonara Malawi.

Peleas con Guy Ritchie por la custodia de sus hijos

Por otro lado, el cineasta Guy Ritchie, actualmente en proceso de divorcio de la cantante Madonna, ha contratado a un destacado abogado británico para intentar que sus hijos se queden en el Reino Unido. Según el vespertino Evening Standard, Ritchie ha buscado el asesoramiento de Stephen Cobb, especializado en casos internacionales de divorcio en los que está en disputa el país de residencia de los hijos de una pareja.

Se cree que Madonna está deseosa de regresar a Estados Unidos tras sus ocho años de matrimonio con Ritchie, durante los cuales la pareja hizo de Gran Bretaña su base principal. El asunto de los hijos es realmente peliagudo, como señala el tabloide: Ritchie y Madonna han tenido sólo un hijo durante su matrimonio, Rocco, de ocho años, que nació en Estados Unidos, y han adoptado también a David, de tres.