Letizia recibe el visto bueno de la nobleza

A Letizia le conceden un premio de rancio abolengo. No es que algún pueblo o ciudad haya decidido nombrarla hija predilecta de una determinada localidad, sino que un corporación de corte nobiliario cuenta con ella para otorgarle una distinción. Mañana, a mediodía, a la Princesa de Asturias le será impuesto el ‘Lazo de Dama’ de la Real Maestranza de Caballería de Sevilla para lo que tendrá que desplazarse a la capital andaluza.

La entrega de este premio será en la misma Real Maestranza de Caballería después de que la Princesa, en solitario, haya visitado una biblioteca de los alrededores de la capital. Tras recibir la distinción, momento en el que estará acompañada por su marido Felipe, la nuera real ofrecerá unas palabritas a los presentes, quizás para agradecer un reconocimiento tan ligado con la aristocracia.

La entrega de este lazo es un honor ya que hasta el momento sólo hay cinco mujeres sin sangre real que lo guarden en sus cómodas. Sin embargo, no será el primer miembro de la Primera Familia en recibirlo. En 2004, fue aprobado nombrar al Rey don Juan Carlos “hermano mayor” de este veterano organismo. Y fue el Rey, como jefe, el encargado de dar el visto bueno de la distinción de la Princesa de Asturias, que aceptó el lazo sin problema. Todas las mujeres de la Casa Real han ostentado este título desde la Reina Victoria Eugenia. Las infantas también lo tienen.

La Real Maestranza de Caballería de Sevilla es una “corporación nobiliaria integrada por caballeros pertenecientes a antiguas familias nobles que llevan a cabo múltiples actividades de carácter benéfico y social, de fomento del arte ecuestre y de apoyo a la tauromaquia”, dicen en su propia página web. Además, es la propietaria de la plaza de toros de Sevilla y patrocina la escuela de tauromaquia de la ciudad. Sin embargo, esta aristocrática institución fue creada en 1248 por el Rey Fernando III El Santo. Y desde entonces pervive.

Esta distinción le llega a la Princesa de Asturias cinco años después de ser conocida por el gran público. Fue el 1 de noviembre de 2003 cuando, de forma algo improvisada y delante de un micrófono, el Príncipe de Asturias hacía público su compromiso con la chica que daba las noticias del telediario de la primera cadena. Una boda y dos hijas después ya tiene una condecoración digna de una Reina, posición que está llamada a ocupar en el futuro.