Katie Holmes se convierte en mujer anuncio

Katie Holmes parece haber dejado el cine a un lado. Y es que, desde que se casó con el famoso actor, devoto de la Iglesia de la Cienciología, Tom Cruise, su carrera cinematográfica no es que haya empeorado, es que no existe. Está ocurriendo algo similar a lo que ya viviera la actriz Nicole Kidman, quien reconoció hace unos días en una entrevista que su matrimonio con el actor fue un lastre en su vida profesional y que se “sentía a la sombra” de Tom Cruise.

 

De ahí que, consciente o inconscientemente, la joven actriz de tan sólo 29 años haya empezado a abrirse un hueco en otras parcelas, en este caso, el mundo de la moda. Es más se ha convertido en todo un icono de la moda y, no son pocas las que copian su estilo. De hecho, ella fue  una de las primeras en recuperar los boyfriend jeans, unos vaqueros de corte más bien ancho y remangados. También ha conseguido que su corte se cuele en las peluquerías de medio mundo. Pese a sus logros, hay  quienes piensan que no es más que una copia de su ‘amiguita’, la ex Spice Girls Victoria Beckham, con la que ha tenido más de un roce por esta cuestión.

Y es que, de ese remanso de felicidad y amistad que se nos quiso vender, apenas si quedan unas cuantas migajas. Hace un par de meses, Beckham decidió poner fin a su pelo ‘a lo garVón’, dando a entender que no le hacía mucha gracia que Holmes le hubiera copiado el peinado. En el mes de septiembre se pudo ver las colecciones de ambas en la Semana de la Moda de Nueva York y, para no variar, no sólo no estuvieron juntas sino que, igualmente, Victoria Beckham estuvo casi todo el tiempo con su nueva amiga, Jennifer López.

Destacar, además, que la tímida actriz ha lucido algunos de sus vestidos como nueva forma de promoción. Así ocurrió en la presentación de la película de Adam Sandler. Como se puede ver en la foto se trata de un vestido con corpiño con escote corazón, de color azul marino y falda tubo. Aunque a simple vista da el pego tras unos cuantos visionados se empiezan a notar ciertas faltas como el excesivo brillo del corpiño o una caída poco espectacular de la falda (Véase imagen).