Chayo Mohedano, ilusionada con un joven treintañero

La sobrina de Rocío Jurado recupera el pulso sentimental junto a un joven treintañero que, según ella, “me ha demostrado en un mes todo lo que no me demostró Antonio Tejado en años”. Chayo Mohedano vuelve a sonreír porque ese hombre que acaba de entrar en su vida le está devolviendo la ilusión perdida.

Con Antonio, el padre de su hijo, la relación es inexistente. La joven cantante confiesa a sus íntimos que se ríe mucho cuando oye decir a algún tertuliano televisivo que se va a reconciliar con él. Y asegura que “no volvería con Antonio jamás. Lo único que nos une es nuestro hijo, y en este sentido yo le trato con respeto por su condición de padre de mi niño”.

En cuanto a su nuevo acompañante, con el que la hemos visto compartir ratos de ocio y sol en una playa andaluza, Chayo prefiere llevar esta relación lo más discretamente posible porque Andrés, que así se llama, “no pertenece al mundo artístico y no le gusta que se hable de él en las revistas”.

Las imágenes televisivas en las que aparece untando crema y acariciando dulcemente la espalda a ese misterioso 'novio' no dejan lugar a dudas. Es el inicio de una historia que puede ser algo importante en la vida de la artista.

Dentro de diez días la sobrina de 'la más grande' se irá a Argentina a cumplir unos compromisos profesionales y, aunque a Antonio Tejado le corresponde pasar con su hijo la segunda quincena de agosto, Chayo no tiene inconveniente en que su ex se lleve al crío una semana antes. Si no pudiera ser así, el pequeño se quedará al cuidado de su abuela materna, Rosa Benito, durante los cinco días que la Mohedano pasará en tierras sudamericanas.

A su vuelta, se marchará a Chipiona para reunirse en esa localidad con sus padres y el resto de la familia. Dos días después de ese regreso (y si Antonio no se ha llevado ya a su hijo) tendrá que verse las caras con Tejado para que éste se quede durante dos semanas con el niño. Cabe esperar que ese hombre que ilusiona a Chayo esté también en tierras chipioneras.