Las amistades peligrosas de la 'high society'

Que Carmen Lomana y Nati Abascal no se llevan es un secreto a voces. Envidias personales, amores no correspondidos...  Hay de todo un poco, pero parece ser que Nati todavía no ha superado que un amor no correspondido -en realidad eran unas cuantas llamadas de teléfono e intentos fallidos de citas- huyera en brazos de la rubia Lomana y se perdiera en ellos.

Cuando se le pregunta por su rivalidad con Nati Abascal -la sevillana es un referente indiscutible de la elegancia- ella responde con ciertos tintes de ironía: "Me parece una mujer estupenda, de hecho, si me la encontrase la saludaría sin problema, yo soy muy educada. Nati y yo nos conocemos desde hace muchos años y no me hagas hablar, que siga su camino. Hemos compartido cosas". ¿Algún novio quizás?

Lo de Ana Obregón ha sido una continua historia de encuentros y desencuentros con compañeros, amantes, amigas y conocidos. Si se tira de memoria y, en su defecto, de hemeroteca, se recordará que hace 15 años, la actriz y Antonia Dell'Atte, ex mujer de su entonces pareja, Alexandro Lequio, se enzarzaron en una lucha de titanes en todos los medios de comunicación que encontarron a su alcance. La cosa iba de amores y de celos.

Las dos mujeres se subieron al ring en una de las peleas más duras que se recuerdan. Insultos, gritos, máquinas de la verdad y demandas más tarde. Todavía hoy las dos temperamentales mujeres no coinciden. Y mira que ha llovido.

Pero Ana Obregón suma y sigue, se enfada con todo bicho viviente que ose 'molestarla'. Desde una relación pasional a tirar los trastos al polaco Darek, que ahora retoza feliz junto a Susana Uribarri, hasta la petición pública a uno de sus amantes, Cayetano Martínez de Irujo, por haberle calumniado. Una rueda de prensa y un propósito de la enmienda (también ha perdido perdón a Jaime Cantizano por todo el daño que le hizo) le sirven para continuar.

Lo que la música una, que no lo separe...

Las triunfitas Chenoa y Geno, eran uña y carne tanto dentro de 'Operación Triunfo' como una vez fuera. Se iban de compritas, se contaban secretos de alcoba, salían de juerga... pero Chenoa no puedo perdonarle a Geno que ésta saliera en televisión defendiendo al que más la ha hecho llorar en su vida, el también 'triunfito' David Bisbal. Punto y aparte, cada una por su lado, y tan contentas.

¿Quién a estas alturas se cree que entre las famosas todo es buen rollo y amiguismo? Pues no, también, más allá de nuestras fronteras, hay unas cuantas celebrities que no se pueden ni ver. Si ya es desagradable pelearse con una amiga, ni qué decir tiene lo que debe ser con una amiga-famosa. Motivos mil para que en cuestión de segundos, la que era la amiga del alma se convierta en la peor de las enemigas.

Victoria Beckham es una mujer de carácter, qué duda cabe, y cuando alguien le cae mal no se corta en hacerlo público y notorio. En su periplo español, Rebecca fue contratada como asistenta de los niños Beckham, pero como la 'nany' no sólo se dedicó a cuidar a los pequeños, sino que también lo hacía con el señor de la casa, Victoria no paró hasta echarla de su lado. Y eso que al principio hicieron muy buenas migas. Ni corta ni perezosa, la niñera despechada, reveló que a David no le gustaba la extremada delgadez de Victoria.

Luego le tocó turno a la Obregón, a la que lo más suave que le dijo fue 'barbie geriátrica' porque Anita osó contonearse delante de su sexy  futbolista. Ana y David compartían sala de cardiovascular en uno de los gimnasios más pijos de la ciudad.

No es la única archienemiga de Vicky, porque con Liz Hurley la cosa tampoco fluye: "Victoria descubrió que Liz dijo algunas cosas muy desagradables sobre ella a sus espaldas. Estaba furiosa y muy ofendida. Decidió que lo mejor era no hablar más con ella", dice un amigo de la Posh de las Spice.

Paris Hilton, por ejemplo, haciendo amistades allá por donde va. Pero tan rápido las hace cómo las deshace, y tiene una larga lista... Con Britney Spears se rompió la amistad porque la cantante decidió abandonar sus malas influencias para no perder a sus hijos, cosa que al final no pudo evitar.

La modelo Kate Moss es en algunos casos demasiado confiada. Kate ayudó a Irina Lazareanu a convertirse en la gran modelo que es ahora. Cuando Irina llegó a Londres se convirtió en el batería de los Babyshamble y pasó a ser una gran amiga de Kate. Cuando la carrera de Irina se consolidó, la 'amiga' se lió con el ex de Kate, Pete Doherty. ¡Ten a amigas para esto!

No es la única. De ser super amigas (y super modernas), Sienna Miller y Kate se sacaron las uñas por un hombre, y no se crean que por uno muy guapo, nada que ver, nada menos que el actor galés Rhys Ifans, gran amigo de la modelo y pareja de la actriz durante algún tiempo. Esta relación terminó hace año y medio.

Paulina Rubio y Thalía vivieron su adolescencia y sus comienzos de sus carreras musicales en el grupo Timbiriche. Rivales desde jovencitas por asumir más protagonismo musical dentro del grupo, con el paso del tiempo y más creciditas, se enzarzaron en otras rivalidades. Paulina llegó a  comentar que sentía vergüenza ante el hecho de que Thalía estuviera con un viejecito, en alusión a Tommy Mottola. Thalía respondió a Paulina: 'Por mi, que se revuelque en su envidia'.

Cuentan que Gwyneth Paltrow era una de las mejores amigas de Winona Ryder, pero se habla en algunos círculos de que Gwyneth encontró en casa de Winona el guión de la película Shakespeare in love y se lo llevó a casa. Gwyneth no paró hasta que consiguió el papel protagonista con el que ganaría un Oscar, aunque perdió una amiga.

Madonna por ejemplo, a la que no deben sobrarle amigos ni enemigos, se ha transformado en la convertidora religiosa de sus 'amigas'. Eso le paso a Britney Spears. Es sabido que, en los últimos años, Madonna ha depositado su fe en La Cábala e intentó convertir a su joven amiga.

Britney asimiló muy bien las nuevas enseñanzas religiosas hasta que nacieron sus hijos y decidió que su religión era ellos y volvió a abrazar el catolicismo. Cuentan que Madonna no la ha perdonado.