Lindsay Lohan bebe los vientos por Leonardo DiCaprio

La actriz estadounidense Lindsay Lohan, de quien hace unos días se dijo que fue la última pareja del fallecido Heath Ledger, está falta de amor. Sin embargo, ya ha encontrado a esa persona que pueda llenar el hueco que hace unos meses dejó su ex, Samantha Ronson. El afortunado: el protagonista de Titanic, Leonadro DiCaprio.

El actor, que está libre desde que en junio rompiera su relación con la supermodelo Bar Refaeli, es su "hombre perfecto". Así de clara y directa lo manifiesta la actriz ahí por donde va desde que le conoció hace unos meses en una fiesta en Hollywood. Aunque ella está muy interesada en el actor, sus amigos dudan que él se plantee nada serio con Lindsay.

"Lindsay está bastante pillada por Leo, pero eso es todo lo que hay por ahora. Ella le conoce, son amigos pero eso es todo. Lindsay sí está dispuesta a que lo suyo llegue a algo más, pero él ni se lo plantea", explica una fuente cercana a la actriz.

Los rumores de que la pareja de actores podría tener una relación surgieron hace unos meses, cuando se les pudo ver juntos en una fiesta en Hollywood.

Un testigo de la escena explica: "En cuanto Lindsay vio a Leonardo fue a por él como las abejas a la miel. Le vio en una esquina de la discoteca y fue directa a por él. Luego ella se le puso a bailar, pero no pasó nada más. Se fueron a casa por separado".

Mientras intenta buscar a un posible nuevo amor, la actriz sigue refugiándose en la bebida. Puede que esto no sea nada nuevo, pero es que Lohan volvió a liarla hace unos días en un exclusivo bar de Los Ángeles. Últimamente muy amiga de lo ajeno, Lindsay robó dos carísimas botellas de champán de la cocina del bar que después se negó a pagar, pese a que el camarero se lo exigiera. Después de montar el numerito gritando a los cuatro vientos que ella no paga por copas, finalmente tuvo que tragarse sus palabras y llamar a una amiga para que le pagaras las botellas. Muy indignada y llorando desconsoladamente, Lindsay abandonó la sala repitiendo: "Yo no pago por beber. ¡Esto es ridículo! Me voy a volver loca".