Famosos amigos de lo ajeno

A la hora de buscar el escenario ideal para celebrar una fiesta, a las celebrities no les importa el coste. Cuanto más caro mejor. Pero cuando llega la hora de pagar, no todos cumplen. A la ya famosa puentea-facturas Lindsay Lohan, que la semana pasada se bebió dos botellas de champán carísimas al grito de "yo no pago por beber. ¡Esto es ridículo! Me voy a volver loca", se le une ahora el caso de la leyenda del baloncesto estadounidense y ex de Carmen Electra, Dennis Rodman. Si bien el caso se Lindsay se solventó al pagar una amiga suya la cuenta, el de Rodman finalizó advertencia policial mediante.

Agentes alemanes se lo tuvieron que llevar arrestado por haberse ido sin pagar cuatro noches en un hotel de cuatro estrellas donde había celebrado una fiesta privada. Así lo informa el popular diario Bild, según el cual el ex baloncestista, de 48 años, fue interceptado el lunes por agentes alemanes en la autopista A45, después de que el hotel alertara a la policía de que se había marchado sin pagar. "Se comportó amablemente. Nos dijo que tenía prisa porque su vuelo partía a las 9.55 de Fráncfort", explica a ese medio Ralf Volk, el agente que lo detuvo en la autopista.

La cuenta de la fiesta, más la multa, ascendieron a 1.700 euros, que un acompañante de Rodman pagó en el acto con una tarjeta de crédito. De acuerdo con ese diario, pese al incidente logró llegar a tiempo al aeropuerto y subirse al avión. En ambos casos y a pesar del requerimiento de pago, ni Lindsay ni Dennis aflojaron la cartera. Para eso están los amigos...