Rafael Cebrián es 'el otro' en la vida de Emma Watson
Hace unos días, unas fotografías en actitud cariñosa entre Emma Watson, la actriz que da vida a la adolescente Hermione en la película Harry Potter, y
Hace unos días, unas fotografías en actitud cariñosa entre Emma Watson, la actriz que da vida a la adolescente Hermione en la película Harry Potter, y Rafael Cebrián, hijo del consejero delegado de Prisa, revolucionaban las redacciones de medio mundo y demostraban que entre ellos había algo más que una simple amistad.
Pero nada más lejos de la realidad, a tenor de las imágenes que ahora publica el diario inglés Daily Mail de la actriz con su auténtico novio, Jay Barrymore, con quien sale desde hace más de año y medio y quien realmente ocupa su corazón.
Frente a los rumores de una relación extraoficial de la actriz y ante la publicación de las fotografías con Cebrián, Watson y su novio pusieron tierra de por medio y se marcharon de vacaciones a Jamaica, donde disfrutaron del buen tiempo tropical, coincidiendo con las vacaciones del Día de Acción de Gracias.
Así pues, el mismo periódico inglés, insinúa que la relación entre Barrymore, de 26 años, y Watson, de 19, podría no pasar por una buena etapa ya que durante su estancia en el Caribe no se profesaron muestras de cariño públicas y su cara era de pocos amigos.
Una situación que sorprende debido a la distancia que les separa y a las largas temporadas que pasan el uno sin el otro. Watson reside en Rhode Island, Estados Unidos, donde estudia Filología Inglesa, y su novio, Jay Barrymore, lo hace en Londres, donde trabaja como broker.
¿Habrá sido este exótico viaje la confirmación de que en realidad la relación entre la joven Hermione y su novio ‘oficial’ estaría llamada a morir? ¿Es Rafael Cebrián solamente el paño de lágrimas de la joven actriz?
Hace unos días, unas fotografías en actitud cariñosa entre Emma Watson, la actriz que da vida a la adolescente Hermione en la película Harry Potter, y Rafael Cebrián, hijo del consejero delegado de Prisa, revolucionaban las redacciones de medio mundo y demostraban que entre ellos había algo más que una simple amistad.