Carmen Lomana y su amigo el marajá

Desde que apareció por primera vez en televisión Carmen Lomana tuvo muy claro que si alguna vez le ofrecían alguna colaboración profesional tenía que divertirse. Si no, no le interesaba. Y eso es lo que ha hecho últimamente. No ha cambiado de forma de vida. La diferencia está en que lo que antes era privado porque no era un personaje mediático ahora es público porque así se lo piden los que la contratan.

Ella dice que se pasea por los mismos sitios, que compra en idénticas tiendas y que hace más o menos lo mismo de siempre. Quizá la única variación es que ahora, además de su círculo social, la conoce hasta el tato. A ella y a sus colaterales como es su chofer Wilson. Aunque no hay que olvidar que al margen de esa imagen frívola, Lomana es una mujer empresaria que lleva sus negocios y sus inversiones con mano férrea.

Le importa poco que la quieran menospreciar acusándola de frívola. Ella no se defiende, sólo explica que “lo soy cuando lo tengo que ser”. Y en cuanto al calificativo de “pija” tampoco le importa mucho. “Qué consideran pija: ¿vivir bien? ¿disfrutar de la vida? Pues viva el pijerío. En lo único que no quiere entrar es en el enfrentamiento con Naty Abascal porque dice que “es algo que os interesa a vosotros (a la prensa) pero no a mí. Tenemos amigos comunes. Nada más”. Y de ahí no hay quien la saque. Es muy difícil enfadarla. Entre otras cosas porque vive en su nirvana particular. Ha estado en la India en el cumpleaños de su amigo el marajá de Udaipur. (Ver vídeo)

Lomana conoce a la familia de hace tiempo y de ahí la invitación. Parece que la hija del marajá, Pasmaya, estudió con ella en Londres y cada vez que pasa por Madrid camino de alguna ciudad europea, Carmen le organiza la agenda social. De todas formas la nueva estrella mediática va a tener poco tiempo para el ocio. Tiene previsto participar en el concurso 'Mira quién baila', además de ser la protagonista de una serie de reportajes televisivos que serían la versión lujo, brillo y esplendor de National Geographic. En vez de aparecer en selvas, cascos polares y desiertos acompañada de cocodrilos, osos polares o pigmeos, ella lo hará en París, Milán,  Nueva York, Londres… mostrando los lugares más exclusivos y sorprendentes. Lomana ejercerá de megaguía del lujo...