Miley Cyrus regresa a España con aires de diva

La expectación estaba servida, pero la llegada de Miley Cyrus a Madrid para presentar su último disco, su participación en ‘Rock in Río’ y sus múltiples proyectos, ha dejado poco más que decepción entre sus seguidores. Y es que la cantante, actriz e ídolo de adolescentes, popular por su papel de Hannah Montana en Disney Channel, pasó ayer fugazmente por los flashes y micrófonos de los medios de comunicación reunidos en torno a la terraza del Hotel Villamagna.

Miley ya no es Hannah Montana. Lo viene dejando claro desde hace algún tiempo con sus ansias de independencia y esa rebeldía propia de los 17 años, algo reprimida, en este caso, por su contrato con la factoría Disney. Pero ahora nos ha quedado más claro que nunca. Cyrus ha crecido, ha madurado y, aunque no reniega de sus comienzos, vuelve con un objetivo claro: dar a conocer su nuevo, adulto y desenfadado yo. “Estoy muy orgullosa del personaje de Hannah Montana porque ha llevado a muchas jóvenes a realizar sus sueños, pero ahora estoy tratando de mostrar mi propia personalidad, de crear mi propia imagen, aunque el público no está muy seguro aún de cuál es”, explicaba a los medios.

Sin embargo, el paso de la joven por la capital ha dejado un sabor de boca agridulce. En ‘tarde, mal y poco’ podría resumirse su visita, si tenemos en cuenta los escasos cinco minutos que posó ante los fotógrafos en el photocall, la rapidez con que contestó a las preguntas de los periodistas en la posterior rueda de prensa y el caso omiso que prestó a sus fans, que no tuvieron ocasión de acercarse a su artista favorita para conseguir un autógrafo, a pesar de estar esperando a las puertas del hotel desde primera hora de la mañana. Parece que Miley también es de las que cuando les parece dejan de lado la profesionalidad para dar rienda suelta a la diva que llevan dentro.

Sin embargo, cabe señalar que Miley Cyrus es noticia porque se encuentra en plena gira con la presentación de su nuevo disco: Can’t be tamed (Hollywood Records / Universal Music), cuyo primer single estrenado el pasado 30 de abril ha sido el que más audiencia ha acaparado en la historia de la cantante. En el videoclip de este tema, dirigido por Robert Hales (Justin Timberlake, Kings of Leon…), podemos ver a una Miley ‘crecidita’ y sensual al más puro Britney Spears o Beyoncé, aireando su autoconfianza y aseverando que tiene que mantenerse leal a sí misma. “He madurado y mi imagen también ha cambiado, algo que se verá también a nivel musical, pero poco a poco. A mis fans les gusta el pop y voy a seguir haciéndolo para ellos, pero en mis conciertos añadiré más rock”, comentaba ayer. Una referencia a la madurez adolescente que, sin duda, se convertirá en un himno entre sus legiones de admiradores de todo el planeta. “Soy una persona muy espiritual. Mi religión gira en torno al amor porque creo que es lo que más falta hace en este mundo, y así lo he tratado de comunicar en este disco”, añadía.

A Miley Cyrus, que quiere dejar de ser Hannah Montanta pero que se encuentra como cabeza de cartel del día que ‘Rock in Río’ dedica al público familiar, no le preocupa que la encasillen en este personaje. “Este nuevo álbum está teniendo una acogida magnífica y no se puede satisfacer a todo el mundo. Como me dice mi madre, tengo que centrarme en ser quien soy y en quien quiero ser y no lo que los demás esperan. Estoy muy orgullosa de lo que he conseguido como Hannah Montanta”. Y es que Miley ha crecido frente al público, con lo que este nuevo CD revela su progresión natural. “Es mi álbum más sincero. Ha sido como una terapia porque he podido expresar lo que siento, lo que pienso”.

Pero ella no sólo canta, también hace películas (el viernes estrena La última canción, para cuyo tema principal ha colaborado con David Bisbal), escribe (en su primer libro, Miles to go, comparte su inspiradora historia con su público, desde sus raíces sureñas al entusiasmo de sus triunfos en televisión, música y cine), diseña (acaba de unirse al modisto Max Azria para crear la firma de ropa ‘Miley Cyrus & Maz Azria’, una nueva línea de moda para la cadena de tiendas Walmart), y colabora en ONG’s (recientemente se ha asociado con Youth Service America, entre otras organizaciones, y ha fundado Get Ur Good On, una red online de apoyo a la juventud). Compromisos que reafirman la madurez de una artista muy completa que, sin embargo, en esta ocasión no ha sabido demostrarlo ante su público. Habrá que esperar a su actuación del próximo domingo en Madrid para ver si, sobre el escenario, Miley vuelve a mostrarse como la simpática y querida Hannah… sin necesidad de la peluca rubia.