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Forlán y su novia, los Casillas y Carbonero americanos
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Forlán y su novia, los Casillas y Carbonero americanos

“Entonces usted también podría cuestionarse por qué respiramos. Si dejamos de respirar morimos. Si dejamos de luchar contra nuestros enemigos, el mundo muere”, decía el personaje

“Entonces usted también podría cuestionarse por qué respiramos. Si dejamos de respirar morimos. Si dejamos de luchar contra nuestros enemigos, el mundo muere”, decía el personaje de Victor Laszlo (interpretado por Paul Henreid) en Casablanca. Quizá huyendo de los viejos fantasmas y de los nuevos espíritus (como la crisis), la revista GQ decoraba sus premios anuales con la temática de la mítica película de la época dorada de Hollywood. Y la verdad es que no le faltaron galanes de cine ni bellezas atemporales.

Para empezar, el actor Clive Owen volvió a Madrid para estar en el hotel Palace y ver la entrega de premios. El actor británico se mostró en todo momento amable con la prensa y con los seguidores que se acercaron al final de la cena para sacarse la fotografía de rigor con él. Vanitatis habló con el intérprete durante unos instantes en los que confesó sentirse encantado con nuestro país, donde ha estado rodando unos meses y aseguró ser un enamorado de “su cocina y su gente”.

Pero la presencia del actor no impidió que la noche, sin duda, fuera de los futbolistas. La atención la captaron el uruguayo Diego Forlán, jugador del Atlético de Madrid y Aitor Ocio, del Athletic de Bilbao, que, pese a su lesión y la goleada que vio como recibía su equipo desde el banquillo, hizo un esfuerzo por acudir a la cita con la revista y con los fans que le esperaban.

Forlán acudió con su novia, la bellísima Zaira Nara, que, enfundada en un vestido de noche rojo, captó la atención de asistentes y fotógrafos. Lástima que fueran los primeros en abandonar la fiesta, porque su noviazgo es motivo de portadas en toda América Latina y de orgullo de la presentadora argentina. De hecho, a pocos minutos de la entrega de premios, Nara escribía en su Twitter: “Mejor deportista del año. ¡Bien mi amor!”.

La gala corrió a cargo de Raquel Sánchez Silva que, vestida por Oscar de la Renta, dio paso a todos y cada uno de los invitados ilustres. A saber: desde el mismísimo Miguel Ríos hasta Alberto Ammán. Lástima que el maestro Sabina se quedara en cama por una “gripe traicionera” que hizo que su mujer Jimena –como la presentaron y él la siente- tuviera que asistir en su lugar.

Carmen Jordá, Malena Alterio, Natalie Seseña, Luis Tosar sin Marta Etura, la modelo Clara Alonso –una de las tres únicas españolas que han desfilado para Victoria’s Secret- o la estupenda pareja formada por Sebastián Palomo Danko y Olivia de Borbón fueron algunos de los asistentes a una fiesta que culminó con la actuación de una orquesta inspirada en el filme Casablanca. Unos rieron y otros conversaron hasta la madrugada, quién sabe si dando pie a que aquello fuera, parafraseando el gran clásico, el comienzo de una gran amistad.

“Entonces usted también podría cuestionarse por qué respiramos. Si dejamos de respirar morimos. Si dejamos de luchar contra nuestros enemigos, el mundo muere”, decía el personaje de Victor Laszlo (interpretado por Paul Henreid) en Casablanca. Quizá huyendo de los viejos fantasmas y de los nuevos espíritus (como la crisis), la revista GQ decoraba sus premios anuales con la temática de la mítica película de la época dorada de Hollywood. Y la verdad es que no le faltaron galanes de cine ni bellezas atemporales.

Iker Casillas