Genoveva Casanova despedirá el 2010 sin sus hijos y sin Gonzalo Vargas Llosa

Muy presumida, obviando que todos la hemos visto con muletas, al hacer ayer su aparición pública Genoveva caminó sin ellas sobre unos peligrosos Manolo Blahnik de charol negro que la alejaban unos diez centímetros del suelo. Era su presentación como imagen de la línea de tratamiento antienvejecimiento Cellularys, Bienestar Direct, y tenía que lucir bellísima. Para ello se enfundó en un diseño de 2nd Skin color champán con un toque de plumas, que realzaba su silueta, y se colocó unos pendientes Chocrón que destacan en su rubia melena suelta.

Tras el turno de las fotos, que se dejó realizar de pie, atendió a los periodistas. Sentada -eso sí-. Su estado de salud, su estancia en Estocolmo y su ingreso en la familia del Nobel Mario Vargas Llosa eran los tres temas de mayor interés, que respondió por partes, sin dejar de lucir sonrisa.

"Me pisó un caballo en una sesión de fotos. En ese momento no me di cuenta y me pasé tres días trabajando como si nada hasta que me empezó a doler pero. Tuve que tomar pastillas... De todo. Pero no se me ha caído la uña, porque lo que me pisó fue el empeine. Yo creo que me queda una semanita y ya". Resuelto el tema de las muletas que lleva desde hace unos quince o veinte días.

La mexicana, ex de Cayetano Martínez de Irujo, se vuelve hoy a su país natal. Llegó el domingo acompañada de su chico y de unas aparatosas maletas -llenas de trajes y de las pieles que lució en su gira sueca-, pero debe volver, ya que los niños están al otro lado del charco y quiere pasar estas fechas junto a su madre, que sufrió un derrame cerebral en febrero."El martes salgo para México. Allí tengo a los niños. El día 24 nos reuniremos en casa de mi abuela. Gonzalo pasará la Noche Buena y la Noche Vieja con su familia".

Tras la Navidad, la vida de Genoveva dará de nuevo un giro. Ella y los niños vuelven a España. "Yo volveré en enero, para la vuelta al cole. Ellos vendrán por su cuenta antes, para pasar la Noche Vieja y Reyes con su padre".

Recién llegada de Estocolmo, donde el viernes, el que podría ser su suegro recibió el Premio Nobel de Literatura 2010, se mostró encantada con la ciudad y lo la experiencia allí vivida. "La entrega de los Nobel fue impresionante. Era mucho mejor de lo que me imaginé desde pequeñita. Siempre me quise dedicar a escribir y ahora lo hago a través de mis reportajes".

Preguntada por lo más notorio del caso; que ya es una más en la familia Vargas Llosa, respondió contentísima: "En la familia de Gonzalo son todos estupendos. La verdad es que ya llevamos tiempo juntos, aunque nadie supiera nada. Desde el principio nos lo planteamos como algo muy bonito y no queríamos que saliera en ningún momento. Quisimos mantenerlo en privado". Pero, pasado el tiempo, ¿hay planes? "¿De qué? Espérate, tranquilo", respondió a un compañero, para después, escuchar la pregunta más difícil: ¿Qué tiene Gonzalo que no tuviera Cayetano? Rió. "Ahí has dado en la herida. ¡Qué bárbaro!", expresó risueña. La multientrevista terminó con las cualidades que destaca tanto de Gonzalo como de Mario Vargas Llosa: "Su corazón". El tiempo dirá si su ingreso en la familia Vargas Llosa es definitivo. Primero hay que ver si la distancia, ahora que ella regresa a España, no es un obstáculo. A la pregunta de Vanitatis, ¿cómo vais a hacer para veros, una vez te mudes a España?, no contestó. 

Enlaces relacionados

- La presentación oficial del noviazgo de Genoveva y Vargas Llosa se planeó con un mes de antelación

- Genoveva, una más en la familia Vargas Llosa

- Genoveva Casanova, chica de anuncio en Navidad

- "Prefiero el rock a los boleros de Luis Miguel"

- Genoveva Casanova se va al cine con su hija

- Del oro y los diamantes a los brazaletes solidarios