Espartaco y Macarena Bazán vuelven a estar juntos

Estas navidades la pareja se dio un compás de espera para reflexionar sobre su situación según contó el periodista Antonio Rossi en La Otra Crónica. Parece que las razones para estos desencuentros tenían que ver con las peticiones de la ex directora de Juegos y Espectáculos de la Junta al torero para que se involucrara definitivamente en la relación. Entre las demandas afectivas figuraría el deseo de compartir domicilio, alquilando o comprando una vivienda común en Sevilla.

Cuando Espartaco salió del hogar conyugal al separarse de Patricia Rato, se traslado a la finca de Constantina y allí se instaló oficialmente mientras los vaivenes de su divorcio pasaban de ser asunto privado a público. Permanecer en el campo era mucho más seguro y menos estresantes ante la presión que ejercían los reporteros para recabar algún tipo de declaración. El caso de Patricia fue diferente porque no tuvo elección y cada vez que pisaba la calle la prensa la esperaba. A pesar del drama, nunca ofreció un mal gesto o una palabra fuera de tono.

La tercera en discordia, Macarena Bazán, también supo esconderse. Tras la publicación de las fotos del torero entrando por la noche y saliendo al día siguiente de su piso, ésta se cambio y se fue a una zona más privada en Los Jardines de Hércules, una urbanización de la zona de Bellavista, a pocos kilómetros de Sevilla. En este caso la discreción estaba asegurada porque los aparcamientos de los edificios son comunes.

La situación de cada uno prácticamente no ha variado. Patricia, ya mujer divorciada, viaja bastante a Madrid para supervisar y arropar a su hija mayor. Espartaco sigue en el campo, aunque sus padres le han adecuado una habitación en el chalet de Cerro Alto (Espartinas) donde pasa varios días a la semana.

Fue el lugar elegido por el torero para organizar una barbacoa y presentar a Macarena a los hermanos y cuñados que no la había tratado directamente. Los padres sí la conocían al compartir un viaje al Algarve donde se suponía que el matador iba a comprar una casa para los dos.

No se hizo la transacción y parece que esto sirvió para distanciarse. Al menos así lo cuentan los que frecuentan habitualmente a la pareja. Macarena esta divorciada y la custodia de sus hijos la mantiene su ex marido, que vive en Huelva, y por lo tanto tiene toda la libertad de actuación. El caso es que ahora, y después de colocar negro sobre blanco, la funcionaria y el torero vuelven a estar juntos, aunque cada uno en su casa.

El distanciamiento y las horas de pensamiento único de estas navidades han servido para poner orden emocionalmente y de ahí que la decisión de volver a empezar marque la relación de esta pareja invisible socialmente.

Hasta ahora Espartaco no ha querido presentaciones oficiales y esa visibilidad es la que pedía Macarena. “Lo que quiere es tener su sitio. Ella aduce que personal, afectiva y laboralmente ha arriesgado mucho más”, explican conocidos de la funcionaria, olvidando quizá que su matrimonio hacia aguas y precisamente por eso se resolvió tan rápido. Ahora hay que saber cuando  tiene intención el torero de aparecer con Bazán en un acto no privado.

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