La estrategia de Carbonero y Casillas para despistar a la prensa en su cumpleaños

Iker Casillas ha sabido muy bien cómo celebrar un gran cumpleaños y salvaguardar todos los detalles ante la prensa. Desde que comenzó su relación con Sara Carbonero en 2010 ha visto cómo los paparazzis le perseguen día sí y día también y, esta vez, no quería que la prensa le impidiese disfrutar de una velada tan especial. No todos los años se cumplen 30.

La estrategia del futbolista fue simple. Casillas llegó solo al hotel, sin la compañía de su novia. De este modo, las cámaras agolpadas frente al edificio no pudieran captar la imagen de los dos enamorados llegando a la exclusiva fiesta. Tampoco respondió a ninguna de las preguntas de los periodistas. Ni siquiera los que quisieron felicitarle.   

El punto divertido de la velada llegó de la mano de un grupo de mariachis que estuvieron cantando en directo y dedicaron rancheras al homenajeado.  

Entre los invitados a la fiesta privada se encontraba el jefe y compañero de Deportes de Telecinco, J.J. Santos, gran amigo de la pareja. En cambio, el resto de asistentes continúa siendo un misterio, ya que las agencias podrían haber vendido la exclusiva a alguna revista del corazón. 

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