Concha Velasco: "He sido la cornuda de España"

A sus 72 años, no hay nadie quien rebata a Concha Velasco. Cada vez que habla, sienta cátedra. Además, con el paso del tiempo ha desarrollado y potenciado uno de los puntos más fuertes de su personalidad: su sinceridad. Si hace unas semanas en el programa La Noria hablaba abiertamente sobre los recuerdos que todavía guarda de su ex-marido Paco Marsó o sobre sus opciones políticas, ahora, en una entrevista que ha concedido a la revista XL Semanal, la actriz vuelve a abrir su corazón y regala titulares a diestro y siniestro. “He sido la cornuda de España”, afirma. “Me arrepiento de no haber luchado más por Paco Marsó; él se fue de casa; estaba enamorado de otra”, prosigue, aunque considera imposible volverse a enamorar. “Soy tan vanidosa, tan coqueta y he amado tanto que me resulta imposible”.

A su vez, la ‘chica ye yé’ manifiesta que sólo ha tenido dos vicios en la vida, “el tabaco y un güisquicillo, una cerveza o un vino” y que “la peor prostitución es la de la gente que va a los programas de televisión a contar cosas de los demás. "Esa sí que es una prostitución consentida e incluso remunerada. Las pobres prostitutas de la calle me merecen mucho más respeto”. Sobre el movimiento de apoyo a Zapatero que encabezó en 2004, dice: “Creo que no lo ha hecho bien. Yo voto socialista, por supuesto, porque no sé cambiar de camisa ni de chaqueta. Soy católica y mi ideología política es el socialismo, pero no a Zapatero en este momento”, confiesa mientras que rechaza que con su actual trabajo en TVE le estén pagando favores. “Uno no acaba presentando un programa clásico de la televisión por haber pedido el voto para nadie. Es estúpido pensar algo así”, sentencia.

Concha Velasco reconoce que se operó hace 12 años, y que “salió mal”. “Lo único que me acompleja es el cuello, y me pegué un tajo y no ha servido de nada. Por lo visto no hay que hacerse un tajo, sino algo más. Fue poquísimo. No rechazo que la gente lo haga. Lo que pasa es que, cuando se tiene mi edad, se te queda una cara sin expresión. Y a mí me gusta mi cara”, dice. Velasco, que triunfa con la obra La vida por delante, cuenta que con Carmen Sevilla, a quien ha sustituido en Cine de Barrio, “no hay ni buena ni mala sintonía, no la hay”. “Creo que Carmen estaba muy contenta de hacer el programa. Y yo ya no lo estoy tanto porque he tenido el problema de que los tres primeros que hice fue con dos muertos: Florinda Chico y Juanito Navarro. Fue empezar yo y morirse todos. He llegado a pensar que era gafe. Luego me he dado cuenta de que, si echas la vista atrás, es algo que siempre pasa. Carmen no quería dejar el programa. Y cada vez que intenté hablar con ella, no lo conseguí. Y lo siento porque la quiero mucho”, finaliza.

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