Los piques entre Nuria Roca y Jorge Fernández

Sí. Es para tanto. En Triana hay que morir. De calor y de gusto. Buena comida, gente divertida y mucho sentido del humor es lo que, a simple vista, destila este barrio hispalense, cuna de toreros, cantaores y bailaores de flamenco. Por eso, no es de extrañar que Jorge Fernández y Nuria Roca eligieran esta mágica orilla derecha del Guadalquivir para celebrar los buenos datos de audiencia de sus programas en la fiesta que Citroën organizó allí con motivo del lanzamiento de su nuevo automóvil DS4 el pasado lunes por la noche. Con un croma festivo insuperable gracias a las vistas del restaurante Abades que presume de estar frente a frente con la Torre del Oro, Roca y Fernández se convirtieron en los mejores embajadores de la casa francesa.

Verde Esperanza de Triana. Así vestía la presentadora valenciana, que deslumbró con un Lemoniez que le sentaba como un guante. Y más, teniendo en cuenta que acaba de ser madre por tercera vez. “Nuria Roca, guapa”. A alguno se le escaparon los vitores, creyéndola reina de Triana. Y como no hay soberana que se precie sin su Rey, o al menos sin su príncipe consorte, allí estaba Jorge Fernández, una personificación de su ruleta de la fortuna. “Fui uno de los misters más afortunados, sí que es verdad. Pero he trabajado mucho, ¿eh?”, decía a Vanitatis. Pero ya se sabe que hasta en Palacio, aunque de tubos catódicos se construya, siempre hay rivalidades sucesorias. “Nosotros nos llevamos bien. No entendemos ese concepto de competencia agresiva”, decía él. Aunque durante la gala tuvieron sus tiritos. Que si el DS4, el coche en cuestión, lo probé yo primero, que no, que fui yo… Terminaron bien.

Encantados estaban los invitados sevillanos con la convocatoria. Con un total look de Mango apareció Mamer Revuelta, al compás de una elegancia de una Sofía Loren made in Sevilla en potencia. Habló de sus nietos, de su marido, el rejoneador Rafael Peralta, y de sus hijas, que llevan en los genes el porte materno. “Esa señora tiene un marido que es crítico de toros”, le decía Mamer a su esposo refiriéndose a Nuria Roca.

Alfredo Vila, director general de Citroën en España, Pepe da Rosa, Aurora Muñoz, la hija del torero Emilio García, la empresaria Marta Gómez, el diseñador Antonio García, el estilista Paco Cerrato, y Javi Navarro, ex jugador del Sevilla, completaron el cartel de invitados que capitaneó Javi Villa, que no es primo del pichichi pero sí socio de Laura Sánchez en la capital hispalense a través de la agencia Go Eventos. El descubrimiento de la noche fue Silvia de Carrión, procuradora de profesión y bloguera por adicción. No me entiendas sólo quiéreme, su blog, triunfa como la Coca- Cola. “Soy como una Carrie Bradshaw pero local”. Y se quedó tan a gusto. Porque sí. La fiesta Citroën no defraudó a nadie. Ni a Sarah Jessica Parker, que delegó en su álter ego.
 

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