Tablada y Bisbal firman la paz en Miami

Elena Tablada ha vuelto a retomar la vida que llevaba en Miami antes y durante la etapa en que fue pareja de Bisbal. Allí se encuentra más tranquila sin los agobios de Madrid, donde cada vez que ponía un pie en la calle se convertía en materia para debates televisivos. Se cuestionaba con quién salía, dónde iba, le endilgaban novios falsos y situaciones comprometidas avalados por fotos inexistentes.

De todas aquellas historias rocambolescas que circularon tras su separación no quedó nada una vez que desapareció del mapa doméstico nacional. Se instaló con su hija Ella en la casa familiar de Coral Gable, que ha convertido en su cuartel general y donde acude Bisbal para ver a su hija.

Tablada nunca ha puesto ningún impedimento al cantante para que esté con la niña y, de hecho, no existe documento legal que regularice las visitas. Después del terremoto que supuso su separación, con el consiguiente deterioro emocional para ambos, las relaciones son ahora cordiales.

Una vez que los elementos ajenos a la pareja han dejado de presionar, Elena y David han tenido más tiempo para tratar sus asuntos personales sin interferencias familiares. Por el momento, no hay vuelta atrás ni posibilidad de reencuentro afectivo, pero sí hay una buena comunicación.

Elena ha retomado también su vida laboral. Viajó a Nueva York para colaborar con la firma de zapatos que la contrata como imagen desde hace años. De paso, acudió a varios desfiles de la Semana de la Moda, donde coincidió con amigos españoles como Custo o Fiona Ferrer. Elena y la ideóloga de Supermodelo fueron las únicas españolas invitadas a un minicrucero por la bahía de Nueva York, al que también asistió Jennifer López encantada de conocerse.

Al día siguiente, la diseñadora de joyas y Fiona volaban a sus respectivos destinos. Fiona, a Madrid, para preparar la mega fiesta de la firma Rabat, y Tablada a su nido miamense con su niña, donde han permanecido unos días hasta su regreso a España, la semana que viene, para que la familia disfrute también de la pequeña.

Elena, que mantiene una excelente relación con Alejandro Sanz y su mujer, tenía intención de asistir a su concierto del jueves por la noche. Al final se torcieron las cosas y se descolgó. El gaditano y su mujer han sido, y son, un gran apoyo emocional tanto para Bisbal como para la diseñadora. De hecho, Sanz fue muy claro con su colega cuando le aconsejó que no dejara que la familia le influyera en determinados asuntos personales, que en la intimidad familiar dos eran compañía y tres multitud.

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