La duquesa de Alba defenderá a su hija en los juzgados

Este verano podría haber sido muy feliz para la duquesa de Alba. Eran sus primeras vacaciones como la señora de Díez, pero no ha sido así. El motivo de su tristeza no ha sido otro que la demanda interpuesta por el que había sido hasta la fecha su yerno favorito, Francisco Rivera, a su propia hija. El torero solicitaba la custodia de su hija, aludiendo, tal y como explicó a Vanitatis, que tiene “todo el derecho” a que su hija viva con él. Ahora también tendrá que enfrentarse a la propia duquesa de Alba.

La exsuegra nunca entendió los verdaderos motivos que llevaron a Rivera a tomar esta decisión y desde el primer momento se posicionó al lado de su hija, que ha pasado el verano con ella. No sólo la madre, sino los hermanos han hecho piña para ayudar a la menor de la casa. Incluso Cayetano, que ha mantenido siempre una relación muy estrecha con el torero, tuvo una charla telefónica con su excuñado muy dura. Se ofreció como mediador, pero Eugenia le pidió que no hiciera nada.

Tal y como adelantó Vanitatis, el próximo 18 de septiembre se celebra el juicio que pondrá frente a frente a Eugenia Martínez de Irujo y Francisco Rivera en el juzgado de Familia de Madrid. Cada uno ha aportado la documentación y testigos necesarios que apoyen y defiendan las posturas hasta ahora encontradas. Ahora se suma un factor más. Como ha contado Beatriz Cortázar en El programa de Ana Rosa, la duquesa de Alba será una de las piezas fundamentales al ejercer como testigo por haber convivido con su hija y su nieta durante un tiempo. La defensa de Eugenia presentará una declaración jurada de la aristocráta.

Todo este proceso se ha convertido en un momento muy delicado para la duquesa. Una situación que está colocando a Cayetana en un gran conflicto emocional.