Tapias y su mujer, anfitriones de Preysler y Cavalli

Sorpresas te da la vida. Ana Obregón lleva veinticinco años luciendo las creaciones de Roberto Cavalli en todo sarao que se precie en España, pero su anfitriona en nuestro país no ha sido otra que Nuria González, esposa del empresario Fernando Fernández Tapias.

Todo ocurrió en la noche del miércoles pasado. En Madrid no se esperaba al matrimonio Cavalli hasta el jueves, puesto que debían inaugurar su nueva tienda en plena calle Ortega y Gasset. No obstante, Eva y Roberto llegaron un día antes para preparar el terreno de cara a la apertura de su nueva tienda y para que todo saliera según lo previsto.

Tras una jornada dura, en la que el matrimonio supervisó con lupa todos los detalles de su nueva boutique en plena Milla de Oro madrileña, el diseñador tanteó la posibilidad de ir a cenar junto a unos amigos. No quería un restaurante al uso, ni estar rodeado de demasiada gente. Solo los suyos, en un ambiente relajado y distendido, lejos de las miradas indiscretas. Es ahí cuando entra en juego el matrimonio Fernández Tapias.

Nuria González comparte amistades comunes con el modisto italiano y no dudó un solo segundo en ofrecer su casa para una cena en petit comité  -el número de comensales no llegaba a diez- para Cavalli y sus más cercanos. Fue una velada de lo más relajada, que transcurrió en la más absoluta discreción.

Entre los comensales, además de los dos matrimonios, se encontraba la hermana de Nuria González, Yolanda, a la que se ha relacionado con Carlos Herrera. También formó parte de la mesa la gran dama del baldosín, Isabel Preysler.