Samantha Vallejo-Nágera: "Nosotros no vamos a ponernos a la altura de Paulina"

Digieren las informaciones que día a día se publican sobre Nicolás Vallejo-Nágera con paciencia y estoicismo y siempre han tratado de mantenerse al margen de la guerra abierta entre el éste y su exmujer, Paulina Rubio. La familia de Colate, con su hermana Samantha Vallejo-Nágera a la cabeza, mantiene la calma en estos momentos al tiempo que muestra su apoyo incondicional al empresario que, según su hermana, estaría "a punto" de pedirles ayuda.

"Colate está bien, luchando. Aún no nos ha pedido ayuda pero lo hará. Nosotros mientras tanto preferimos mantenernos calladitos. Por muchas cosas que digan, que duelen aunque ya estemos acostumbrados, no vamos a explotar. No vale la pena. No nos vamos a poner a la altura de la otra parte. Además, el 95% de lo que dicen es mentira", confesaba la empresaria y cocinera en conversación con Vanitatis durante la fiesta Bye bye summer que se celebró este jueves en la tienda Purificación García de la madrileña calle Serrano.

En opinion de Samantha Vallejo-Nágera, al extinto matrimonio no le queda más remedio que llegar a un acuerdo "porque hay un niño por medio y tiene que sufrir lo menos posible. Tienen que arreglarlo", señala, no sin resaltar que no será fácil debido a la personalidad de la mexicana. "Ella es complicada, es una mujer con mucho carácter, como todas, porque yo también soy igual".

Aunque no le guarda recor, en las palabras de la empresaria se percibía cierta tristeza y decepción para con Paulina Rubio. "No sigo siendo su amiga, nunca he tenido relación con ella, es una cuñada más, bueno, ahora excuñada", confesaba sin perder la sonrisa, mientras atisbaba de reojo al resto de asistentes a la fiesta.

Entre ellos destacó la presencia de Amelia Bono. La hija del expresidente del Congreso de los Diputados reconoció estar "deseando" que las memorias de su padre salgan a la luz. "Tengo muchas ganas. Estamos expectantes porque yo no he leído nada", añadía.

Amelia Bono, que reveló sin tapujos que tanto ella como su marido, Manuel Martos, están "buscando ya la niña", no quiso hacer declaración alguna sobre las últimas imágenes de su madre, Ana Rodríguez, con la nueva pareja de ésta, el empresario mexicano Ernesto Manrique. En vez de eso, prefirió departir sobre moda y confesar que no se considera una fashion victim aunque siga las tendencias y adore la moda, al igual que su madre. "Es guapísima y tiene estilazo", se limitó a decir.

La ausencia más destacada fue la de Mónica Martín Luque, que alegó tener un viaje a Sevilla. Mabel Lozano, Marta Reyero, Mónica de Tomás y la propia Purificación García trataron de paliar el vacío en un evento que contó con el toque magistral de Noho Comunicación y Ana Marchesi.