José Ortega Cano: "Entre unos y otros me van a matar"

Ortega Cano se encuentra desbordado por la situación que está viviendo con traiciones familiares y enfrentamientos generacionales con su hijo José Fernando, que se unen a las secuelas físicas de las que aún se resiente tras su archiconocido accidente de tráfico y por las que debe acudir al hospital periódicamente para las revisiones habituales.

Hace unos días acudió a la clínica Ruber y desde allí explicó a Vanitatis que no entiende lo que está ocurriendo en su entorno porque él siempre se ha portado bien con su familia y con la gente que está a su alrededor. “No he hecho mal a nadie, sino todo lo contrario”. Del famoso topo –la sobrina que en conversaciones particulares ha criticado al torero y al que se pusiera por delante- prefiere no opinar, "porque quiero que se acabe de una vez esta historia y seguir con mi vida. Entre unos y otros me van a matar”.

Quizá para él lo más importante es llegar a solucionar las discrepancias generacionales con su hijo José Fernando. “Muchos chicos tienen una etapa rebelde y complicada. Tiene 18 años, cree que lo sabe todo y hay que dar tiempo al tiempo. Tiene que madurar como nos ha pasado a todos”. En este sentido, Ortega tiene a una muy buena aliada. Gloria Camila sirve de puente entre el hermano y el padre y parece que las cosas marchan mucho mejor, según confirma el propio torero. De hecho, el joven visita la casa familiar de Fuente del Fresno que "sigue siendo su casa", siempre que quiere.