¿Qué fue de Eva Sannum?

El pasado domingo falleció Pablo Goizueta, uno de los miembros de la familia de empresarios marbellíes que supuso el nexo de unión entre el príncipe Felipe y la modelo noruega Eva Sannum. Fue Miguel Goizueta, primo del fallecido y amigo del heredero, el que reunió a éste y a Sannum durante una cena en un restaurante mexicano de Madrid al que solían acudir. Corría el año 1997.

No ha sido esa la única causa de que el nombre de Eva Sannum vuelva a la actualidad tras muchos años en la sombra. El debate sobre la publicación de las fotografías de Kate Middleton llegó también hasta la Comisión de Ética de la Prensa de Noruega. Sorprende que Eva Sannum, que ‘padeció’ un exceso de popularidad a raíz de su romance con el príncipe Felipe, forma parte de esa comisión, que tuvo que dilucidar si se debían publicar allí las fotografías en topless de la mujer del príncipe Guillermo, algo que ha acabado ocurriendo. La maniquí lleva una vida alejada de las cámaras por más que, para los medios de su país, siga siendo un personaje importante que aparece, de vez en cuando, en revistas de sociedad.

No deja de ser curioso que muchos españoles la rechazaran como reina precisamente con la excusa de que había posado en topless en sus trabajos como modelo. Fue poco después de su ruptura con el príncipe Felipe cuando Sannum entró a formar parte de ese Comité, primero como suplente y después como vocal. Actualmente es redactora de la agencia Try, y, según Miguel Mielgo, periodista freelance residente en Dinamarca y responsable de JM Noticias, es una excelente profesional que goza de una gran reputación en su medio, el publicitario. “Ha ganado el Lápiz de Oro como escritora de textos, premio bastante significativo en Noruega en lo que a publicidad se refiere. En Noruega es una mujer respetada, al contrario de lo que pasó en España”.

Y es que ya quedan lejos los tiempos en los que sufrió, según Mielgo, una campaña de desprestigio que la llevó a casos extremos, como el de aquella señora anónima de Barcelona que presumió de haberle escupido y haberla llamado “puta” en televisión. Por aquellos días cuenta Mielgo que el acoso llegó a unos extremos deplorables. Cuando Sannum aseguró que había sufrido “el acoso porque conocía a una persona famosa” en un medio noruego, los medios españoles lo tradujeron, de manera oportunista, por un: “Me he hecho famosa por mi relación con el príncipe Felipe”.

Desde entonces muchos son los medios que la han tentado para escribir sobre el príncipe español. La revista Se og Hør le ofreció bastante dinero por hacerlo, pero ella no quiso. “El acoso por aquella época fue bestial. Yo llegué a ver a una manada de periodistas españoles saltando por encima de los coches cuando la perseguían por las calles de Oslo”, asegura Mielgo.

Hoy, Sannum tiene 37 años y se preocupa de sus dos hijos. Su pareja es Torgeir Vierdal, también publicista. En el Facebook de él hay una fotografía de portada con la silueta a contraluz de su mujer y de sus dos hijos. Ella también es asidua a las redes sociales y cuenta con más de 7.900 seguidores en Twitter, donde sube fotografías del dormitorio de su hijo o artículos periodísticos que llaman su atención.

Hace cuatro años, el matrimonio fue noticia por comprar un slot (palacete) de tres pisos edificado en 1880, de estilo neorrenacentista y valorado en 12’5  millones de coronas, equivalente a 1’6 millones de euros. La mansión tiene una superficie habitable de 410 metros cuadrados y está clasificada como una vivienda unifamiliar.

A pesar de que se pasó media vida trabajando como modelo, ahora no se dedica a ello. Sus cuentas no van mal, ya que según el informe que publica anualmente una lista de contribuyentes, se puede comprobar que, hasta hace unos años, Sannum obtenía unos ingresos de 45.900 euros anuales, de los que pagaba 17.090 en impuestos. Tanto ella como su marido disfrutan, por tanto, de una situación económica holgada.

Un noviazgo polémico

Cuesta recordar que hubo un tiempo en el que Sannum estuvo a punto de llegar a ser la reina de España. El príncipe Felipe la conoció a finales de los años 90 y llegó a ser fotografiado en varias ocasiones con ella. Por entonces, la joven se pagaba sus estudios con su profesión de modelo. Ese fue el detonante de que el propio rey don Juan Carlos no aceptase la relación, que causó una agria polémica en nuestro país. El noviazgo se acabó rompiendo a finales de 2001.

Detrás de la decisión del príncipe Felipe se encontraba Gregorio Peces-Barba, uno de los padres de la Constitución. El príncipe le dijo adiós el pasado mes de julio, cuando falleció. Cuando media España se preguntaba sobre la conveniencia de que don Felipe se casase o no con una plebeya extranjera, fue Peces-Barba el que medió para que rompiese su relación con Eva Sannum, para que ese romance nunca llegase a ser oficial para Casa Real.

Fue el principio de un desentendimiento de los medios españoles hacia ella. Aunque quizá sea eso, precisamente, lo que ella prefiere.