A falta de infantas, el novio de la ex de Bono será la 'estrella' de los Premios Telva

Durante años, la alternancia de las infantas en los Premios Telva de moda formaba parte del engranaje de la convocatoria. Un año era doña Elena, otro doña Cristina y así hasta que la duquesa de Palma desapareció del mapa y se instaló en Washington. La última aparición de Jaime de Marichalar como marido de la primogénita Borbón fue también en unos Telva. Tras el “cese temporal de la convivencia”, ella en solitario siguió acudiendo hasta que el año pasado declinó la invitación. Las noticias que sobre su cuñado Urdangarin se publicaban en El Mundo (que pertenece a Unidad Editorial, al igual que la revista Telva) informando de sus tropelías provocaron que la infanta Elena diera plantón a Pedro J. y desapareciera de la escena de una de las convocatorias más prestigiosas.

A falta de infantas de España, este año las estrellas de la cena de gala que se celebrará este martes en el hotel Palace de Madrid serán los premiados Stella McCartney, Tatiana Santo Domingo, novia de Andrea Casiraghi, y la firma Cortana. Pero habrá sin duda una cuarta protagonista, que ha decidido que la fiesta Telva es el momento perfecto para mostrar públicamente su nuevo estado emocional y presentar a su pareja en sociedad. Ana Rodríguez, exmujer de Bono y una de las fijas de esta convocatoria solía acudir acompañada de alguna de sus hijas cuando se divorció del presidente del Congreso. No fallaba ningún año y además era una de las mujeres mejor vestidas y así aparecía en la lista de elegantes y en los comentarios de los  especialistas.

Eduardo Ladrón de Guevara, maestro de la Alta Costura, era su diseñador fetiche y también lo será este año, aunque se desconoce el color y el corte del vestido. Ana Rodríguez, a la que dentro de muy poco no habrá que ubicarla como señora de Bono, tiene intención de aparecer en la fiesta rutilante con su novio Ernesto Manrique. El empresario mexicano de cuarenta y siete años, divorciado y directivo de una empresa de pañales ubicada en Toledo ya no tiene problemas para aparecer con su pareja, antes amiga. Los dos matrimonios (Bono/Manrique) solían compartir cenas y almuerzos familiares. Después llegaron los desencuentros de ambas parejas y Ana se divorció primero y el mexicano después.

El destino los volvió a colocar en el mismo camino con estado civil de solteros y, al cabo del tiempo, pasaron al siguiente escalón, y así hasta que decidieron convertirse en pareja. Este martes, en la fiesta de los Telva, serán los más fotografiados, a no ser que Ana prefiera que su novio pase desapercibido y no pose en el photocall. O que a última hora les entre el pánico escénico. Seguramente es la mejor manera de poder llevar un noviazgo tranquilo sin tener que esconderse, como ha sucedido hasta ahora.