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Sylvie Van der Vaart rehace su vida con un adinerado empresario francés
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Sylvie Van der Vaart rehace su vida con un adinerado empresario francés

Si Rafael Van der Vaart ha rehecho su vida con la mejor amiga de su exnovia, Sylvie, ésta tampoco ha perdido el tiempo y ha ido

Foto: Sylvie  Van der Vaart rehace su vida con un adinerado empresario francés
Sylvie Van der Vaart rehace su vida con un adinerado empresario francés

Si Rafael Van der Vaart ha rehecho su vida con la mejor amiga de su exnovia, Sylvie, ésta tampoco ha perdido el tiempo y ha ido recomponiendo, poco a poco, una vida que pareció desquebrajarse cuando la pareja decidió poner punto y final a una relación que se truncó en la pasada Nochevieja cuando el futbolista del Hamburgo agredía a Sylvie tras un acalorado enfrentamiento. "Soy un idiota. Lo siento mucho. Nunca tendría que haber pasado", reconocía el futbolista al diario alemán Bild. 

Parece ser que una vez que conoció el incipiente amor de su ex con su mejor amiga, Sabia Boulahrouz, Sylvie ha dado rienda suelta a su amor y se ha refugiado en los brazos de Guillaume Zarka, un adinerado empresario francés de 33 años. La modelo y presentadora de televisión ya disfruta de su nueva relación por las calles de París, hasta donde Sylvie viajó para protagonizar una muy sugerente sesión de fotos de lencería.   

Sólo las redes sociales han sido testigo de estos encuentros furtivos. Hasta ahora, ya que no se esconden de los objetivos de las cámaras que les siguen los pasos. A pesar de que la distancia es una de los inconvenientes de esta relación -ella vive en Alemania por el hijo que tiene con Rafael- y él en París, donde tiene parte de sus negocios.

La prensa alemana ya se ha hecho eco de esta relación y según aseguran en algunos medios, Guillaume Zarka es “sociable, divertido, educado y muy divertido”, todo un partido para la modelo.

Si Rafael Van der Vaart ha rehecho su vida con la mejor amiga de su exnovia, Sylvie, ésta tampoco ha perdido el tiempo y ha ido recomponiendo, poco a poco, una vida que pareció desquebrajarse cuando la pareja decidió poner punto y final a una relación que se truncó en la pasada Nochevieja cuando el futbolista del Hamburgo agredía a Sylvie tras un acalorado enfrentamiento. "Soy un idiota. Lo siento mucho. Nunca tendría que haber pasado", reconocía el futbolista al diario alemán Bild.