Jaime Ostos y Mª Ángeles Grajal se casarán por la iglesia este verano en la finca Yerbabuena

Ya han pasado 25 años desde que Jaime Ostos y María Ángeles Grajal se casaran por lo civil en la localidad madrileña de San Lorenzo de El Escorial. Su historia de amor y de desamor está llena de idas y venidas. La primera fue en 1990, cuando Grajal pidió la separación asegurando ante los medios de comunicación que el diestro la maltrataba. Tiempo después, con las aguas ya calmadas después de un más que sonado divorcio, la neumóloga desmintió sus duras acusaciones y volvió a pasar ante el juez para reafirmar su amor por Ostos.

Desde ese momento, la pareja siempre ha tenido en mente volver a casarse, pero esta vez por la Iglesia para, así, jurarse amor eterno antes los ojos de Dios, tal y como ¡Hola! recoge en sus páginas. La finca Yerbabuena de Ortega Cano -donde hay una pequeña capilla consagrada- será el lugar en el que Ostos y Grajal harán realidad un sueño que llevan años persiguiendo.

A pesar de que no hay fecha definitiva para el enlace, lo cierto es que llevar tantos años buscando este día les facilitará mucho la organización de la ceremonia. Tanto es así, que ya han empezado a poner los primeros nombres en su lista de invitados, donde no faltará su hijo Jacobo Ostos y algunos compañeros del torero, que este año cumplirá 83 años.  

Esta será la cuarta boda para Jaime Ostos después de casarse en 1960 en la Basílica de La Macarena con María Consuelo Alcalá, con la que tuvo dos hijos, Gabriela y Jaime. Tras nueve años de feliz matrimonio, se separaron, obteniendo la nulidad eclesiástica. Años después, se casaría dos veces con María Ángeles Grajal, y como no hay dos sin tres, con ella pasará por el altar por tercera vez.