Es noticia
Menú
La Xunta cierra el grifo a los Franco y éstos ‘chapan’ el Pazo de Meirás
  1. Noticias
ACTUALIDAD

La Xunta cierra el grifo a los Franco y éstos ‘chapan’ el Pazo de Meirás

Ningún visitante ha puesto un pie en el Pazo de Meirás (Sada, La Coruña) en lo que llevamos de año. Propiedad de la familia Franco desde

Foto: La Xunta cierra el grifo a los Franco y éstos ‘chapan’ el Pazo de Meirás
La Xunta cierra el grifo a los Franco y éstos ‘chapan’ el Pazo de Meirás

Ningún visitante ha puesto un pie en el Pazo de Meirás (Sada, La Coruña) en lo que llevamos de año. Propiedad de la familia Franco desde el año 1938 y antigua residencia de Emilia Pardo Bazán, sus puertas vuelven a estar cerradas después de una dura batalla judicial entre el Gobierno gallego -que lo declaró Bien de Interés Cultural- y los herederos del Caudillo.  Las visitas guidas y gratuitas, que comenzaron en marzo de 2011 después de que el Tribunal Supremo obligara a abrir las puertas del inmueble al público, han sido suspendidas después de que la Xunta de Galicia decidiera no renovar el convenio de seguridad y dejar de pagar los gastos que ésta generaba.

“Les hemos solicitado un calendario de visitas para poder organizarlas”, asegura le Dirección General de Patrimonio Cultural de la Xunta. “Ellos deciden si quieren o no seguridad, la Xunta ya no va a correr con los gastos de organización que todo ello supone”. De esta manera, el Gobierno popular de Alberto Nuñez Feijóo pone fin a la concesión que, según informan desde el Ayuntamiento de la localidad de Sada, estaba en manos de la empresa Prosegur y que él mismo negoció mediante un acuerdo el que se comprometía a pagar los gastos de seguridad -que ascienden a más de 21.000 euros entre marzo de 2011 y finales de 2012-. “No se trata de ningún pago ni compensación a la familia Franco, es sólo la garantía de que las visitas no causarán deterioros en las instalaciones”, justificó Feijóo en 2011.

Los muros de este Pazo han sido testigo de los mejores veranos de la vida de Carmen Martínez-Bordiú y el lugar donde la familia Franco guardó los bienes que se llevó del Castillo de Torrelodones y que eran parte Patrimonio Nacional. Escenario de la exclusiva de la boda de Jimmy Giménez-Arnau con Merry Martínez-Bordiú, nieta del Caudillo, por la que se embolsaron un millón de pesetas en 1977, allí comenzaron a compartir juegos los nietísimos con el príncipe Felipe y las infantas Cristina y Elena.

Un ‘regalo’ de los gallegos

Pagado con dinero público, el Pazo de Meirás, utilizado por Franco como residencia de verano, fue un regalo demasiado caro para Galicia. Familias expropiadas para que sus tierras multiplicaran el terreno que ya tenía el Pazo, vecinos que tuvieron que empeñar sus joyas para costear su compra, reconstrucción y posterior mantenimiento y listas con nombres y apellidos de aquellos que no colaboraban en “la buena causa” y que eran tachados de rojos.

Con una fortuna inmensa generada durante la dictadura, en 2008 la Consellería de Cultura, dirigida por el BNG, declaró el Pazo como Bien de Interés Cultural en la categoría de monumento. Desde entonces, las luchas judiciales comenzaron. Contrarios a la obligación de abrir cuatro días al mes tras su declaración y varias demandas, finalmente el Tribunal Supremo desestimó el último recurso presentado por Carmen Franco Polo, hija de Francisco Franco, confirmando, así, la clasificación dada por la Xunta. A partir de esta decisión, más de 2.300 personas solicitaron visitar el Pazo, una cifra que se aleja de la realidad ya que sólo se permite el paso los viernes de cada mes -de 11.00 a 14.00 y de 15.00 a 18.00- en grupos de 15 personas. Eso sí, menos en agosto, mes en el que la familia Franco disfruta de sus dominios a cuerpo de rey.

Ningún visitante ha puesto un pie en el Pazo de Meirás (Sada, La Coruña) en lo que llevamos de año. Propiedad de la familia Franco desde el año 1938 y antigua residencia de Emilia Pardo Bazán, sus puertas vuelven a estar cerradas después de una dura batalla judicial entre el Gobierno gallego -que lo declaró Bien de Interés Cultural- y los herederos del Caudillo.  Las visitas guidas y gratuitas, que comenzaron en marzo de 2011 después de que el Tribunal Supremo obligara a abrir las puertas del inmueble al público, han sido suspendidas después de que la Xunta de Galicia decidiera no renovar el convenio de seguridad y dejar de pagar los gastos que ésta generaba.

Francisco Franco