David Cameron y su familia disfrutan de unas vacaciones en Ibiza salpicados por las críticas

El primer ministro británico David Cameron, su mujer Samantha y sus tres hijos, Nancy, Arthur y Florece, disfrutan desde este sábado de una semana de descanso en Ibiza. Aprovechando que en Gran Bretaña es fiesta hasta este martes, han hecho las maletas y han llegado a la isla balear en un vuelo de bajo coste.

Nada más llegar, el matrimonio Cameron aprovechó las buenas temperaturas y salió a disfrutar de la gastronomía de la zona de Santa Gertrudis . A pesar de que el primer ministro intentó pasar desapercibido entre los turistas que se encontraban por allí, no fue posible dada su posición en la vida pública. Ataviada con un bikini color fucsia, Samantha se relajó a después de comer en una hamaca mientras que su marido leía un libro y sus hijos jugaban en la arena.

La presencia de David Cameron tres días después de que dos radicales extremistas asesinaran a machetazos en Londres a un soldado británico ha desatado decenas de críticas en los medios de comunicación del país.

La imagen del matrimonio disfrutando del sol en una tumbona y tomando café en un local a pie de la playa ha puesto contra las cuerdas la gestión del primer ministro. Algunos medios británicos como Mirror, The Guardian o The Sun no se han cortado en criticar la actitud de Cameron y su familia por haber viajado fuera del país cuando éste aún se está recomponiendo de la conmoción del último atentado que ha sacudido a la capital.

La oposición laborista también se ha unido a las críticas así como algunos miembros de las filas liberales, que gobiernan junto a los conservadores de David Cameron. Ante esto, uno de los portavoces de Downing Street emitió un comunicado para indicar que Cameron “está al mando y cuenta con un equipo de apoyo con él”. "Tenemos internet, tenemos teléfonos móviles. Creo que Cameron podría regresar antes de Ibiza a Londres que si estuviera en Cornualles", apuntan miembros de su partido.

Esta no es la primera vez que el matrimonio disfruta de la isla pitiusa. En 2011 el matrimonio y sus hijos pasaron unos días de vacaciones en una casa al norte de la isla. A pesar de que han vuelto a repetir destino turístico, este viaje puede salirles más caro, sobre todo a nivel político.