Charisse Verhaert: “Julio Iglesias y Miranda viven juntos, no se han separado”

Desde que entró a formar parte de la familia Iglesias Preysler, Charisse Verhaert se ha convertido en uno de los personajes alternativos de las firmas comerciales, cuando las hermanas de su marido, Tamara Falcó y Ana Boyer, no pueden hacerlo o el caché es inferior. Oral-B la ha elegido a ella directamente para que sea la imagen de su nueva pasta de dientes. Su aspecto saludable y su sonrisa han sido factores determinantes.

La belga divide su vida profesional entre Suiza, Alemania y Bélgica, donde trabaja como modelo publicitaria, y la personal entre Madrid y Miami. A Julio José, en cambio, le tira más Estados Unidos, con lo cual hay veces que su relación es a larga distancia y por lo tanto las discusiones prácticamente nulas.

“Es muy difícil enfadarse con Julio porque tiene muy buen carácter. Es verdad que yo viajo mucho, pero eso sucede en muchos matrimonios y no pasa nada. En lo único que no coincidimos es que a mí me gusta que nos quedemos en casa y a él le encanta salir. Pactamos y ya está”. Del día de su boda, celebrada haces seis meses, recuerda un momento: “Cuando entré en la capilla y vi a la gente que quiero y al fondo a Julio”.

No tienen casa en Madrid y la pareja se instala en la mansión Preysler cada vez que viene. “Me llevo muy bien con ella. No se mete en nada y, al contrario, cuando estoy de bajón da unos consejos muy acertados. Es una buena psicóloga y procura que no se la note cuando no está bien”, asegura Charisse. En estos momentos, la evolución de Miguel Boyer no es la esperada y  eso condiciona la vida familiar. “Mejora poco a poco. Es una situación difícil y dura para todos”. Prefiere no añadir más comentarios y hablar de otro tema. De julio Iglesias asegura “que es muy divertido y nunca me aburro con él. Tenemos trato con los hermanos pequeños, que adoran a Julio”.

Políticamente correcta

Al preguntarle si sabía de las informaciones que se habían publicado sobre una posible  separación de Miranda y Julio Iglesias, la modelo da su versión: “No es así. Viven entre Punta Cana y Miami porque los niños ahora van al colegio y Julio tiene su vida profesional por todo el mundo. Viven juntos. No están separados”.

En cuanto al resto de la tribu, Charisse es políticamente correcta. Y aunque los Iglesias/Preysler/Falco/Boyer se vean muy poco, porque así lo han comentado los propios protagonistas, la modelo dice lo contrario. Por ahora Julio y ella no quieren tener hijos. “Vamos a esperar unos cuantos años. No quiero ser una madre rigurosa, sino como la mía, que nos dio una educación muy liberal. Nos dejaba que aprendiéramos de nuestros errores”, dice Charisse.

No está interesada en la política de su país, pero sí es consciente del momento de crisis que afecta con menos y mayor medida a su entorno. “En Bélgica hay mucho paro entre la gente joven. Y es terrible que la gente mayor se quede sin trabajo y sin posibilidad de reengancharse”. Cuando se le pregunta por la monarquía belga, prefiere no comprometerse directamente, aunque explica que “en Bélgica los reyes solo utilizan el francés y eso origina mucha división. Yo hablo flamenco”. A buen entendedor...