Adiós, querido tío Manolo

Manolo Escobar fallecía este jueves en su casa de Benidorm a los 82 años recién cumplidos. Arrastraba desde hace tiempo problemas de salud que se habían agravado en las últimas semanas. A pesar de ser un icono de la canción española, huía de cualquier protagonismo, destacando por su sencillez y su fondo humano. Sus allegados le recuerdan como una buena persona por encima de todo. Quienes le conocen señalan que para él lo primero era su familia, de la que forma parte la periodista Ana García Lozano. Sobrina del artista, es hija de uno de sus tres hermanos, que le acompañaba a la guitarra. La presentadora ha querido, a modo de homenaje, escribir unas líneas de despedida a su tío.

Siempre me resultó difícil entrevistar a mi tío, aunque me tocó hacerlo en alguna ocasión y más o menos salimos airosos. Hoy me pide Vanitatis que escriba algunas líneas sobre él, no sólo como periodista, sino también como sobrina, y os aseguro que no me resulta tampoco fácil.

Antes que el artista, estaba el hombre, el tío, un tío cariñoso, alegre, trabajador y generoso. Un hombre que siempre tuvo los pies en el suelo y que nunca cayó en vanidades, ¡con lo fácil que le hubiera resultado!

De niña le admiré por la entrega que siempre tuvo con su público. A veces se le juntaba la actuación de la tarde con la de la noche, porque era una legión de admiradores, bueno, de admiradoras, las que hacían cola delante de su camerino y él no dejaba a ninguna sin su autógrafo y sin su beso. ¡Faltaría más!

Ya como mujer, como periodista, fue una suerte trabajar en distintos medios y escuchar sólo buenas palabras por parte de compañeros que habían tenido la ocasión de conocerle. Compañeros que hoy me están transmitiendo todo su cariño.