Rosauro Varo y Amaia Salamanca, de puente romántico en Venecia

Ciudad romántica por antonomasia, con el permiso de París, Venecia se ha convertido este puente de la Constitución en el destino escogido por Amaia Salamanca y su pareja Rosauro Varo, al que pusieron rumbo desde Madrid el pasado jueves y del que regresaron este domingo en clase business, tal y como ha podido confirmar Vanitatis.

Durante estos cuatro días, el empresario y la actriz se alojaron en el Luna Hotel Bagnoli (ver en imágenes), un auténtico palacio veneciano de cinco estrellas gran lujo cerca a la plaza de San Marcos y que ofrece, entre otros servicios, góndolas y lancha motoras para el desplazamiento de sus clientes. Los precios del hotel oscilarían entre los 342 euros de una habitación doble deluxe y los 1.333 euros de la suite principal con vistas a la laguna y la famosa plaza.

Desde que Vanitatis anunciara en primicia el embarazo de la actriz el pasado mes de septiembre, la pareja se ha mantenido más unida que nunca. En esta ocasión, han viajado a la ciudad italiana solos y sin la compañía de Alfonso de Borbón, Eugenia Silva, Javier Hidalgo o su novia Sol González, miembros de la pandilla de amigos a la que Rosauro y Amaia suelen unirse cuando planean algún viaje, como hicieron este verano en Bali.

Durante estos días, ambos han aprovechado para conocer la ciudad, viajar en góndola (vea las imágenes) y hacer varias compras de cara a la época navideña, que será más especial que las anteriores por la llegada de un nuevo miembro a la familia.

A pesar de que en este tiempo Amaia Salamanca ha lucido una envidiable figura en la que apenas se le ha notado los primeros meses de embarazo, tras pasar un segundo mes en el que las náuseas le hicieron perder tres kilos, las fotografías a las que ha tenido acceso este medio demuestran que los cinco meses de embarazo siguen sin apenas notarse.

En esta ocasión, y lejos de los vestidos cortos y ceñidos que lució en la boda del hijo del alcalde de Sevilla, Juan Ignacio Zoido, a mediados de noviembre y en Miami durante el Recent Cinema from Spain, la actriz ha optado por un calzado cómodo, pantalones pitillo -que evidencian aún más su delgadez-, abrigo y gorro y bufanda de color gris.

En las instantáneas, la pareja se muestra muy cariñosa en todo momento, paseando y fotografiándose en los lugares más emblemáticos de la ciudad, como el Puente de los Suspiros, la Plaza de San Marcos y los famosos canales venecianos, por los que han navegado resguardados del frío por una manta ofrecida por uno de los gondoleros.

Sin embargo, y a pesar de que la pareja ha tenido un viaje de lo más romántico, lo que más ha llamado la atención a los fotógrafos que les han seguido es que la actriz hiciera el recorrido desde el aeropuerto Marco Polo de Venecia al hotel y viceversa en lancha, sobre todo por su avanzado estado de gestación y no optaran por trasladarse hasta la Plaza de Roma de Venecia en taxi y ya, desde allí, continuar en una embarcación ya que el viaje por mar es superior a una hora.

Una historia de amor que parecía imposible

Cuando se conocieron en 2010, muy pocos vaticinaban que la relación entre el empresario y la actriz iba a durar algo más que unos meses. El flechazo entre ellos fue tal que la larga trayectoria sentimental de Rosauro Varo dio paso a una estabilidad apenas conocida por él.

Metida de lleno en el mundo de la farándula tras su éxito en la serie de Telecinco Sin tetas no hay paraíso y la mini-serie sobre Letizia, en la que interpretó a la Princesa de Asturias, Amaia Salamanca acabó con la fama de mujeriego de Rosauro -cuya lista de conquistas incluye nombres como los de Eugenia Martínez de Irujo-, con el que tardó varios meses en hacer oficial su noviazgo. Desde entonces, y durante estos más de tres años, en muy pocas ocasiones han estado separados si no ha sido por motivos profesionales.