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La nieta de Adolfo Suárez solicita ante el Ministerio de Justicia el Ducado de Suárez
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es la legítima heredera al morir su madre

La nieta de Adolfo Suárez solicita ante el Ministerio de Justicia el Ducado de Suárez

Alejandra Romero ha pedido al Ministerio de Justicia su correspondiente título tal y como anuncia este miércoles el Boletín Oficial del Estado

Foto: Alejandra Romero (Gtres)
Alejandra Romero (Gtres)

El protocolo nobiliario marca que para solicitar un título al que se debe acceder por defunción se debe esperar al menos un tiempo prudencial. Unos meses que se traduce en lo que se conoce como guardar luto. Pues bien, seis meses después de la muerte de Adolfo Suárez, la legítima heredera al Ducado de Suárez, Alejandra Romero, ha reclamadoal Ministerio de Justicia su correspondiente título, tal y como anuncia este miércoles el Boletín Oficial del Estado.

La sucesión en el título de Duque de Suárez ha sido solicitada por doña Alejandra Romero Suárez, por fallecimiento de su abuelo, don Adolfo Suárez González, lo que se anuncia por el plazo de treinta días, contados a partir de la publicación de este edicto, a los efectos del artículo 6.º del Real Decreto de 27 de mayo de 1912, en su redacción dada por Real Decreto 222/1988, de 11 de marzo, para que puedan solicitar lo conveniente los que se consideren con derecho al referido título”, reza el escrito.

Alejandra, de 24 años, es hija de Mariam Suárez, primogénita del expresidente, y de Fernando Romero. La joven, llamada a ser la próxima duquesa de Suárez, ha ejercido su derecho para así empezar a representar el ducado que en 1981 el Rey don Juan Carlos otorgó a su abuelo para premiar “su abnegación, tacto y prudencia al servicio de la reconciliación de todos los españoles como presidente del Gobierno”.

Un título que generó desavenencias

Sin embargo, aquella concesión no pudo mantenerse al margen de las controversias familiares que posteriormente se sucedieron, tal y como ya informó Vanitatis. En aquel momento (1981), el heredero directo era Adolfo Suárez Illana –su hijo y cabeza del clan–porque no primaba la primogenitura, sino que los títulos nobiliarios los heredaba el primer hijo varón. Así se establecía hasta que se aprobó en 2006 la Ley deIgualdad para la Sucesión de Títulos Nobiliarios,y por derecho le correspondía a Mariam, la mayor de los hijos, que falleció en marzo de 2004 víctima de un cáncer, por lo que Alejandra se convirtió en ese momento en la heredera legítima.

Por entonces, la joven contaba con sólo 16 años yera difícil pronosticar si aquella adolescente sería capaz de llevar el peso del ducado y representar los valores que un día su abuelo personalizó como presidente. La nueva ley, como ocurrió con muchas nobles familias, también agitó la solidez del clan Suárez recrudeciendo la relación entre tío y sobrina. Illana no quería perder ese título que durante tantos años prometía ser suyo mientras Alejandra, alentada por su padre, el viudo de Mariam, tampoco cesó en sus deseos de poseer el ducado como la legítima heredera en la que se había convertido.

Tal fue esa rivalidad que en 2009 hubo un intento por parte de Adolfo Suárez Illana de recuperar el títuloy con ese objetivole envióal Rey la documentación precisa que sustentaba su pretensión.Entre sus argumentos se encontraba que era él quien mejor representaba ese importantísimo legado y que con él se perpetuaba el nombre del expresidente ya que él y su primogénito también se llaman Adolfo. Sin embargo, poco le duraron a Adolfo Suárez Illana sus aspiraciones al comprender que no había nada que hacer. Ni siquiera el Rey podía mediar en ese asunto.

Más tarde,la madurez, elsentido de la responsabilidad y una consolidada carrera como abogada a sus sólo 24 años, dieron a Alejandra Romero los argumentos necesarios para convencer a todos de que ella debía ser la próxima duquesa de Suárez. Así se consiguió devolver la concordia a una familia marcada por el espíritu de consenso que un día representó Suárez.

El protocolo nobiliario marca que para solicitar un título al que se debe acceder por defunción se debe esperar al menos un tiempo prudencial. Unos meses que se traduce en lo que se conoce como guardar luto. Pues bien, seis meses después de la muerte de Adolfo Suárez, la legítima heredera al Ducado de Suárez, Alejandra Romero, ha reclamadoal Ministerio de Justicia su correspondiente título, tal y como anuncia este miércoles el Boletín Oficial del Estado.

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