La hermana de Mohamed VI habitará la finca que Felipe González vendió en Tánger

La princesa Lalla Meryem, la hermana díscola del rey de Marruecos, será quien viva en los terrenos de Tánger que Felipe González vendió este verano a la familia real saudí. El príncipe Salman, que fue quien compró la finca que el expresidente poseía en la playa de Jbila, una de las zonas más exclusivas de Tánger, “ha decidido obsequiar a la hija de Hassan II con este regalo como cortesía de las buenas relaciones que han entablado los dos países musulmanes”, indican a Vanitatis fuentes cercanas a la familia real saudí.

La dádiva incluye los 5.000 metros cuadrados que el jeque adquirió a González más otro terreno similar que el propio Salman poseía junto al anterior. Ahora, el solar en el que un día el exlíder del PSOE pensó en levantarse una residencia de verano, se convertirá en un palacete de estilo islámico en el que residirá la hija de quien reinara en Marruecos durante 38 años y hermana del actual monarca, una princesa que plantó cara a la tradición con su sonado divorcio.

Como informó Vanitatis, Felipe González llevaba tiempo negociando la venta de estos terrenos con la familia real saudí, pero aprovechó este verano una estancia del príncipe Salman en la ciudad marroquí para trasladarse a Tánger junto a su esposa, Mar García Vaquero, y cerrar la operación. De hecho, las grúas ya están presentes en las propiedades para levantar el que será el palacio de la princesa Meryem, según ha comprobado in situ este medio.

Lalla Meryem siempre fue la favorita de su padre, el del rey Hassan II. Ella le dio al soberano alauita su primera nieta, Lalla Sukaina, nombre también de la primera nieta del profeta Mahoma, de quien desciende la familia que reina en Marruecos. Su predilección por ella era tal que incluso consiguió que su padre consintiera que se divorciara a pesar de lo que eso representaba para la tradición. De hecho, este fue el segundo divorcio en la historia de Marruecos. Que la primogénita del rey dijera no a FouadFilali, hijo del que fuera primer ministro del rey Hassan, Abdelatif Filali, no estuvo muy bien visto por aquel entonces. Aunque todo Marruecos comentaba con estupefacción lo ocurrido, nadie se atrevía a decirlo en voz alta. La casa real alauita no llegó siquiera a facilitar información sobre el hecho. Tampoco fue difundido por la prensa del país.

Doña Letizia y Meryem, buena relación

La “bella Lalla Meryem”, como la llaman sus súbditos, es muy querida en su país. Todos adoraban a su padre y ella es su viva imagen. En Europa es donde su perfil es más desconocido. Sin embargo, su rostro se ha hecho más visible en el viejo continente desde la última visita que los reyes de España realizaron a Rabat. Mientras Felipe VI y Mohamed VI hablaban en la cena que tuvo lugar en Rabat como bienvenida, en un segundo plano se veía a las princesas Lalla Meryem, Lalla Hasna y Lalla Asma con Doña Letizia. Los que acudieron a este ágape certifican la gran amistad que la Reina Letizia gestó con la princesa Meryem, muy afín en costumbres. Ambas fueron capaces de hacer más frugal el rígido protocolo de la monarquía alauí en el interior de palacio. La amistad entre las dos familias se gestó en tiempos del Rey Juan Carlos y de Hassan II, y todo parece indicar que sus hijos van a continuar con la relación.