El hijo de Cela amenaza a Marina Castaño con embargar sus bienes
Los abogados del hijo del escritor explican a Vanitatis que la periodista tiene 30 días para hacer frente al pago de 5,2 millones de euros de forma voluntaria
Como cada lunes desde que empezase el curso escolar, el catedrático Camilo José Cela Conde acudía a su despacho de la Universidad de Islas Baleares para continuar con sus labores de investigación e impartir clases de Filosofía e Historia. Nada le hacía sospechar que la semana arrancaría con novedades y que sólo dos días después, este miércoles, debería convocar una rueda de prensa con su equipo jurídico para dar respuesta a las inquietudes de los medios de comunicación que desde primera hora del martes comenzaron a llamarle.
El fallo del Tribunal Supremo rechazando el recurso que había presentado la que fuese mujer de su padre, Marina Castaño, y que, por tanto, obligaba a la periodista y a la Fundación Camilo José Cela a pagar al hijo del célebre autor 5,2 millones de euros, situaba a las dos partes del litigio en el foco mediático. Después de más de una década enfrentados por la controvertida herencia del escritor, la justicia da la razón de forma definitiva al hijo y ahora éste debe ser indemnizado con la millonaria cuantía dado que el reparto de los bienes del premio nobel no se hizo dentro de la legalidad cuando falleció.
Finalmente, si ninguna de las dos primeras premisas se cumplen, ni pagan ni llegan a un acuerdo, “se puede pedir la ejecución provisional de la sentencia” y ya serían los jueces los que determinasen cómo debe resolverse. Entre las opciones que tienen los magistrados se encuentra la de ordenar el embargo de las propiedades, tal y como ha sucedido en otros casos similares.
El patrimonio de Marina Castaño
De ser así, la batalla entre Castaño y Cela Conde se recrudecería ya que la periodista se vería obligada a vender parte de su patrimonio. Según ha podido saber Vanitatis, Marina tiene varias empresas y propiedades a su nombre. Además de su mansión en la Urbanización Puerta de Hierro –Vanitatis adelantó que la tenía a la venta por siete millones de euros– en la que convivió con Cela hasta que el escritor falleció, la periodista tiene otras propiedades como su vivienda de Guadalajara, Lérida y Mallorca (todas heredadas de Cela) de las que se desconoce si en la actualidad siguen perteneciendo o no a su activo patrimonial.
Pero además, la viuda del autor de La Colmena heredó también todas sus empresas, aunque la actividad que llevan a cabo todas ellas ha ido menguando con el paso del tiempo. En la actualidad y, según ha podido saber Vanitatis a través de los datos que facilita una conocida agencia de rating, Marina tiene cinco empresas a su nombre en las que figura como administradora única. Sin embargo, sólo tres de ellas se encuentran activas a día de hoy, después de que Lengua y Literatura AIE y Palabras y Papeles S.L. diesen por cerrada su actividad hace un tiempo.
Se trata de las sociedades Salbos de la Sierra S.A., que fue creada en 1993, tiene domicilio en el pequeño pueblo de Sotosalbos (Segovia) y su principal negocio es el alquiler de habitaciones y la hostelería; Estudios Iceberg S.L., constituida en 1999, ubicada en su residencia de Puerta de Hierro y dedicada a la edición de libros; y Letra y Tinta S.L., la más representativa e importante de las empresas que la periodista heredó de Cela y que fue creada en 1997 para explotar los derechos de autor del escritor.
Como cada lunes desde que empezase el curso escolar, el catedrático Camilo José Cela Conde acudía a su despacho de la Universidad de Islas Baleares para continuar con sus labores de investigación e impartir clases de Filosofía e Historia. Nada le hacía sospechar que la semana arrancaría con novedades y que sólo dos días después, este miércoles, debería convocar una rueda de prensa con su equipo jurídico para dar respuesta a las inquietudes de los medios de comunicación que desde primera hora del martes comenzaron a llamarle.