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Helena Resano, la mujer que diseña bolsos tras dar las noticias
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Está apostando por un nuevo proyecto solidario

Helena Resano, la mujer que diseña bolsos tras dar las noticias

La presentadora de los informativos de La Sexta apuesta por un nuevo proyecto solidario que la ha llevado a diseñar bolsos, una labor que compagina con la televisión

Cuando Helena Resano abre la puerta del taller en el que se confeccionan sus bolsos, su presencia enseguida contrasta con el escenario. En la sala de la fábrica en la que aproximadamente diez personas trabajan con ahínco con pieles y cremalleras, Helena emerge subida a unos altos tacones, con un ceñido vestido negro y perfectamente maquillada. No le ha dado tiempo a pasar por casa y llega al taller directamente desde los estudios de Atresmedia donde cada día a las 14:00 horas presenta el informativo de La Sexta.

Cuando recibe a Vanitatis esboza una sonrisa y pronto empieza a presentar a quienes se han convertido en su mano derecha en el proyecto que acaba de iniciar. Hechas las presentaciones, Helena se dirige a una estantería donde aproximadamente se apilan una veintena de bolsos perfectamente embalados.

Está orgullosa y no puede ni quiere evitarlo. Esta periodista, ahora reconvertida en diseñadora de bolsos, está a punto de ver nacer el que es ahora su proyecto más importante, por detrás de su familia, por supuesto.

La pregunta es obligada. ¿Cómo se convierte una presentadora de informativos en diseñadora? “Bueno la idea de hacer bolsos llega un poco después. Lo primero es que yo me digo a mí misma que quiero hacer cosas. Siempre que han contactado conmigo ONG’s yo siempre me he prestado a todo lo que me han pedido porque creo que los que somos conocidos podemos tener un poquito más de tirón y podemos animar a la gente. Cuando me han dado algún premio periodístico con dotación económica siempre lo hemos donado. Sin embargo, esas colaboraciones se me quedaban pequeñas. Yo quería hacer algo más y a raíz de un viaje de mi marido con una ONG a Uganda los dos supimos que teníamos que ponernos en marcha. No sabíamos muy bien qué hacer, pero había que hacer algo”.

Bolso que a Helena le trajo su marido de UgandaRespuesta: La idea de los bolsos surge porque Aitor me trae un bolso hecho a mano de Uganda. Era de papel y pesaba muy poco. Justo lo que me gusta a mí, que desde que me operaron de las cervicales los bolsos se han convertido en una tortura porque siempre pesan mucho. En el bolso de una mujer encuentras de todo. Desde el juguete que te ha dejado tu hijo, la peonza de tu hija, las toallitas, el maquillaje… Y quería un bolso que se adaptase a mí.

Aquellas reflexiones nacían en verano y ahora, sólo unos meses después, esos bolsos que ella misma diseña —aunque reconoce que dibuja muy mal— ya se pueden comprar en su web shop.helenaresano.com por 195 euros. Unos beneficios que íntegramente van destinadosa Uganda y que servirán para mejorar la calidad de la educación que los niños reciben allí.

Cuando Helena lleva ya un tiempo hablando en varias de sus frases aparece un “nosotros” y algún verbo en primera persona del plural. Y es que en el nuevo proyecto de la periodista su marido participa muy activamente. “Esto es al 50%”, dice y, como si de una premonición se tratase, cruza la puerta Aitor, el hombre que la conquistó y con el que ha formado esa familia que completan Pablo, de siete años, y Emma, de doce.

Bolsos españoles

En el taller en el que Helena Resano recibe a Vanitatis hay muchas personas. Ninguna de ellasse dispersa por ver una cámara y continúan haciendo su trabajo al margen de que la mujerque está a un metro escaso acaba de presentar un telediario que han visto casi un millón y medio de espectadores. Para Resano ver a esos trabajadores es también una satisfacción: “No quería traer un bolso de China ni traer pieles chinas. Quería usar piel española y que el bolso fuera español al 100%. Cuando a la gente que está aquí vinimos a decirle que íbamos a encargar tantos bolsos nos recibieron con una sonrisa de oreja a oreja porque eso suponía darles trabajo”.

Aunque lleva dos décadas dando información y siendo una contadora de historias, como ella misma se define, Helena reconoce que no puede evitar sentir “un pellizco en el estómago”. Sobre todo cuando da las peores noticias del día, esas que hablan de las dificultades de la gente para llegar a fin de mes y de la corrupción. “Nunca he sido un busto parlante. No puedo llegar a casa, cerrar la puerta y olvidarme de lo que ocurre. Sé que parte del insomnio que sufro es porque tengo mi familia, mis hijos, y me preocupa mucho el mundo que les vamos a dejar y ver que la corrupción está tan arraigada en todos los estamentos sociales”.

P: Y hablando de sus hijos, ¿le gustaría que fueran periodistas?

R: No, gracias, pero desgraciadamente ven muchos informativos.

P: ¿Desgraciadamente por qué?

De no cumplirse sus deseos, ella experimentará lo que un día vivieron sus padres. Cuando una jovencísima Helena Resano dijo que quería estudiar Periodismo en su casa de Pamplona se echaron las manos a la cabeza. “Imagínate el panorama. Yo tengo un hermano arquitecto, otro médico y una hermana ingeniera de telecomunicaciones y entonces llego yo, que soy la pequeña, con las rebajas”, dice con la ternura que hace pensar en los que están lejos, pues toda su familia sigue viviendo en la cuna de los San fermines.

“Demostrar que eres más que unos ojos agota”

A sus 40 años y con dos décadas como profesional de la información, Helena Resano habla de la desigualdad entre hombres y mujeres con conocimiento de causa. Afirma con rotundidad que la igualdad no existe, que ellos siguen cobrando más y se indigna cada vez que un periodista le pregunta cómo concilia maternidad y trabajo. “Eso nunca se lo preguntan a un hombre”, explota.

El año pasado Helena Resano apareció en un ranking de belleza como una de las presentadoras de informativos más atractivas de la televisión. Entonces escribió enfurecida un blog reclamando un ranking igual para ellos que, de momento, no existe. Aparecer en esa lista le hace recordar cómo fueron sus inicios profesionales en los que sus ojos color océano llamaban poderosamente la atención: “Cuando yo empecé en la radio hubo alguien que me dijo: de ti sólo valen tus ojos. Estar demostrando todo el tiempo durante 20 años que eres algo más que unos ojos, algo más que una cara, agota. Y te enfadas pero afortunadamente tienes el día a día para demostrar que no eres solo eso”.

Ahora, dos décadas después, su profesionalidad no se cuestiona y continúa marcando records de audiencia en un informativo que cada día se consolida. Asegura que informar es lo único que sabe hacer. “Soy una contadora de historias y precisamente esta de los bolsos es muy bonita”.

Cuando Helena Resano abre la puerta del taller en el que se confeccionan sus bolsos, su presencia enseguida contrasta con el escenario. En la sala de la fábrica en la que aproximadamente diez personas trabajan con ahínco con pieles y cremalleras, Helena emerge subida a unos altos tacones, con un ceñido vestido negro y perfectamente maquillada. No le ha dado tiempo a pasar por casa y llega al taller directamente desde los estudios de Atresmedia donde cada día a las 14:00 horas presenta el informativo de La Sexta.

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