El círculo íntimo de Doña Cayetana hace piña en torno a su viudo, Alfonso Díez

Carmen Tello y Curro Romero se han convertido en el mejor apoyo para Alfonso Díez, que no levanta cabeza desde que murió su mujer. Está solo en el palacio de las Dueñas, donde todo le recuerda a la duquesa. Pronto hará las maletas y abandonará esta casa sevillana, aunque por ahora no ha mantenido ninguna conversación en este sentido con el nuevo titular del ducado.

Este fin de semana, algunas de las verdaderas amistades de la duquesa en Sevilla han querido arroparle. Curro Romero, Carmen Tello, los doctores Muñáiz y Trujillo, Antonio Burgos y su mujer, Isabel, han querido pasar un rato con él e intentar distraerle. Carmen Tello, la persona que más cerca ha estado siempre de la duquesa, organizó un almuerzo en su casa para que Alfonso se aireara. Una reunión íntima en la que la gran protagonista ha sido la gran ausente. Al final la conversación giró en torno a Cayetana. Muchas anécdotas, muy buenos recuerdos e infinidad de historias compartidas. Hasta el menú fue dedicado a ella. Comieron arroz picante y carne asada, que era algo que le encantaba a la duquesa, dicen que de sus platos preferidos.

Para Alfonso esta reunión supuso una inyección de optimismo. También para el resto de convocados. Todos ellos mantenían un contacto prácticamente a diario con Cayetana y están notando mucho su ausencia.

De hecho, este lunes es el cumpleaños de Curro Romero y no ha querido celebrarlo. Todos los años lo hace y nunca faltaba la duquesa. “No estamos para fiestas”, comenta Carmen Tello a Vanitatis. De hecho el torero ha pedido a la hermandadde los Gitanos que cancelaran el homenaje que le habían organizado para el día 8. Así lo entendieron y se retrasará para cuando todos se encuentren mejor.