Es noticia
Menú
El secreto mejor guardado de Ana Botella
  1. Noticias
la alcaldesa, discreta sobre su vestuario

El secreto mejor guardado de Ana Botella

“¿De quién es el vestido que luce esta noche?”. “Es mío”. Esa es la respuesta de plantilla que tiene la alcaldesa de Madrid cuando le preguntan

Foto: La alcaldesa, durante los Premios Telva Moda 2014 (Gtres)
La alcaldesa, durante los Premios Telva Moda 2014 (Gtres)

“¿De quién es el vestido que luce esta noche?”. “Es mío”. Esa es la respuesta de plantilla que tiene la alcaldesa de Madrid, Ana Botella, cuando en alguna alfombra roja o acto institucional se le pregunta por el diseñador del vestido que luce. Ese es su mayor secreto. Vanitatis se ha puesto en contacto con el gabinete de prensa de la política para saber los parámetros que tiene a la hora de escoger su vestuario, si lo compra o se lo dejan los diseñadores. "La alcaldesa no tiene asesora de imagen ni tiempo para tenerla. No le prestan los trajes ni se los regalan, los compra", nos confirman desde el consistorio madrileño.

En los últimos premios de la revista Telva, la regidora llevaba un diseño de Lorenzo Caprile, que ya ha lucido al menos en cinco ocasiones este año. Puestos en contacto con el gabinete de prensa del diseñador, nos confirman que "la alcaldesa es una clienta estupenda. No tiene grandes exigencias y, generalmente, compra los trajes que ya están hechos. Nunca ha pedido ningún trato de favor ni tampoco descuento. Además, paga religiosamente".

Las alfombras rojas son siempre el foco de atención de todas las revistas y blogs de moda. Los famosos, que generalmente van vestidos de diseñadores que les dejan sus creaciones para que luzcan guapas y guapos, se convierten en el mejor escaparate de promoción para las firmas.

En el caso de Ana Botella, según cuenta a este portal una persona de su círculo, simplemente no le gusta decir quién la viste ya que, con independencia de tener muy buena relación con casi todos los diseñadores, prefiere no crear favoritismos. Una máxima que también cumple su esposo, el expresidente Aznar, a quien tampoco le gusta revelarlo. Desde los tiempos en los que vivía en el palacio de la Moncloa hasta ahora, la política ha sido una defensora a ultranza de la moda española y del ‘made in Spain’. Por eso, es fácil verla en algunos desfiles de la pasarela Cibeles y en algunos premios de revistas de moda.

Otros vestuarios mirados con lupa

La alfombra roja de los Oscar es, sin lugar a dudas, la mayor tienda virtual. Todo diseñador que se precie está presente en esta fiesta. Incluso los gabinetes de prensa de cada diseñador envían previamente sendas notas de prensa a los medios en las que detallan las joyas, los trajes y complementos que lucen las estrellas.

En nuestro país cada aparición de la reina Letizia es estudiada al detalle. En el caso de la soberana, averiguar quién la viste o de quién son los complementos que lleva resulta más fácil, ya que tiene un diseñador de cabecera, Felipe Varela, aunque últimamente también ha apostado por otros como Hugo Boss, Adolfo Domínguez o Carolina Herrera.

Así como en el mundo de espectáculo los famosos no tienen ningún problema en contar quiénes son sus diseñadores de cabecera, en la política, la cosa cambia. Hay algunas líderes que si llevan algún modelo excesivamente costoso o de alguna firma extranjera, prefieren que dicho dato no se publique para evitar polémicas, dado el momento de austeridad que vive el país.

“¿De quién es el vestido que luce esta noche?”. “Es mío”. Esa es la respuesta de plantilla que tiene la alcaldesa de Madrid, Ana Botella, cuando en alguna alfombra roja o acto institucional se le pregunta por el diseñador del vestido que luce. Ese es su mayor secreto. Vanitatis se ha puesto en contacto con el gabinete de prensa de la política para saber los parámetros que tiene a la hora de escoger su vestuario, si lo compra o se lo dejan los diseñadores. "La alcaldesa no tiene asesora de imagen ni tiempo para tenerla. No le prestan los trajes ni se los regalan, los compra", nos confirman desde el consistorio madrileño.

El redactor recomienda