Sonsoles Ónega, confidente de la Reina Letizia: “Es una mujer muy comprometida”
Puede que a Sonsóles Ónega no le guste el titular de este reportaje. Seguro que recuerda la pregunta que, en aquella fría mañana, le hicimos sobre su amiga
Puede que a Sonsoles Ónega no le guste el titular de este reportaje. Seguro que recuerda la pregunta que, en la fría mañana en la que tocaba hacer su entrevista, le hicimos sobre su amiga, la Reina Letizia. Pero como ella misma dice: “Soy periodista. Yo también la habría hecho”. La llamada 'confidente de la Reina', como se la ha bautizado, es mucho más que eso, ya que se patea día a día los alrededores del Congreso de los Diputados en busca de la mejor información para Informativos Telecinco y además ha publicado varias novelas de éxito. La última de ellas, Nosotras que lo quisimos todo, habla de las mujeres que se han creído el “timo” de las mujeres que tienen que hacer malabares para conciliar la intensa vida laboral con la familiar. Como muchas otras. Como ella misma. Como esa amiga de la que no quiere hablar demasiado.
“Tener una carrera profesional y tener hijos no es una prescripción universal para las mujeres del siglo XXI. Sin embargo, con que una sola quiera hacerlo tiene que poder hacerlo sin llegar a la meta absolutamente cansada. Lo que yo lanzo en el libro es la necesidad de que no nos rindamos antes de tiempo”, asegura esta mujer cuyo recorrido profesional está marcado por la seriedad, el rigor y por un apellido, Ónega, que ciertamente no ha tenido que utilizar para abrirse puertas. Cierto que sí le ha servido como aprendizaje, porque ser la hija de Fernando Ónega no es cualquier cosa: “Mi padre sigue siendo un manual de instrucciones al que yo recurro muchas veces. Sería absurdo negarlo”.
El último libro de su padre, Juan Carlos I, el hombre que pudo reinar, también ha sido una de sus últimas lecturas, la que amplía ese inevitable orgullo de hija que siente: “Creo que ha hecho un gran esfuerzo por hablar con todo el mundo que tuviese una opinión sobre el Rey Juan Carlos y creo que le ha quedado una de esas obras que permanecerán en el tiempo y que serán un constante manual de consulta”.
Como se habrá visto a lo largo y ancho de estas líneas, la relación de su familia con los Borbones no es un tema del que le apasione hablar, pero no le molesta catalogar a la Reina como una “mujer comprometida con los temas de las mujeres y con la educación. Ahí está la clave para que construyamos una sociedad distinta”, asegura, además de admitir que ambas siguen “manteniendo contacto” desde los tiempos de CNN+, difunto canal en el que se conocieron, entablando una amistad especial que dura desde entonces y que la llevó a firmar como testigo en la boda de los entonces Príncipes de Asturias. La respuesta tímida denota lo poco que le gusta hablar del tema, pero sin embargo sabe perfectamente las reglas del juego periodístico; un juego que ella también usa en favor de esas mujeres de este siglo, de esas herederas de un feminismo que trajo bendiciones y también maldiciones.
¿Feminismo o no feminismo?
Al hablar de su Beatriz está claro que hay ciertas similitudes entre esa mujer obligada a decidir entre irse a Hong Kong a aprovechar la oportunidad de su vida o quedarse al lado de su familia. Dura dicotomía entre la oportunidad y lo que seguro que, pese a los parecidos, ella aún no ha tenido que vivir en carne propia. Sí que sabe lo que es trabajar a contracorriente: “Yo tardo mucho en escribir los libros porque no tengo el tiempo necesario que hay que dedicarle a esto. Le robo horas a las noches y a los fines de semana. No me queda otra porque las jornadas parlamentarias son superabsorbentes; son todo menos conciliables. Al final tienes que ser muy disciplinado intentando encontrar el hueco”, asegura.
El objetivo del libro también está claro: “El primer paso responde a una necesidad personal de saber qué les estaba pasando a las mujeres de mi generación, que es una generación que ha crecido con las libertades ganadas, pero está perpleja ante el funcionamiento de la sociedad. De hecho, decidí escribirla cuando yo ya he sido madre y tengo mi carrera profesional. Yo llego a los viernes en coma y de ahí surge la necesidad de saber qué nos ha pasado y qué posibilidades hay de hablar de lo que yo llamo ‘el timo de la mujer trabajadora’”.
Ese es el timo que ha llevado a esta mujer de aspecto enérgico y mirada segura a plantearse a través de unas cuantas páginas que las de su género no tienen por qué ser Juanas de Arco heroicas en la casa y en el trabajo, ya sean amas de casa o reinas, mujeres sencillas o trabajadoras todoterreno. El peso de la heroicidad también es duro para las mujeres.
Puede que a Sonsoles Ónega no le guste el titular de este reportaje. Seguro que recuerda la pregunta que, en la fría mañana en la que tocaba hacer su entrevista, le hicimos sobre su amiga, la Reina Letizia. Pero como ella misma dice: “Soy periodista. Yo también la habría hecho”. La llamada 'confidente de la Reina', como se la ha bautizado, es mucho más que eso, ya que se patea día a día los alrededores del Congreso de los Diputados en busca de la mejor información para Informativos Telecinco y además ha publicado varias novelas de éxito. La última de ellas, Nosotras que lo quisimos todo, habla de las mujeres que se han creído el “timo” de las mujeres que tienen que hacer malabares para conciliar la intensa vida laboral con la familiar. Como muchas otras. Como ella misma. Como esa amiga de la que no quiere hablar demasiado.