Es noticia
Menú
Miguel Poveda: “Ser padre es un aliciente increíble para cantar”
  1. Noticias
presenta nuevo disco con poemas y sonetos

Miguel Poveda: “Ser padre es un aliciente increíble para cantar”

El cantaor estrena disco y, dentro de poco, este mes de mayo, también paternidad. Un álbum de poemas y sonetos de Lorca o Hernández sirve de preámbulo a una de sus grandes experiencias vitales

Foto: Miguel Poveda (Foto: PABLO LÓPEZ LEARTE)
Miguel Poveda (Foto: PABLO LÓPEZ LEARTE)

Está de enhorabuena y hasta su mirada lo delata. Miguel Poveda estrena disco y, dentro de poco, este mes de mayo, también paternidad. Se le adivina la emoción al entrevistarle, ya que es amable pese a su cordialidad, se muestra discreto pero también deseoso de compartir un gran momento de alegría y de evolución vital. Por una parte, estrena su Sonetos y Poemas para la libertad, que reúne textos de Alberti, Lorca o Miguel Hernández en una confluencia de estilos única, y a eso se suma la realización de un deseo largamente acariciado por el cantante: el de ser padre. El método para serlo es (como él mismo aclara) una gestación subrogada a la que no quiere tildar de ‘vientre de alquiler’. “Lo de la paternidades un aliciente increíble porque se me han activado otros mecanismos a la hora de cantar”, nos confiesa en el hotel de Madrid en el que realizamos esta entrevista. Lo dice a pleno pulmón en una mañana que parece tan brillante como sus planes. “No soy el único artista que tiene hijos y tiene que compatibilizar su carrera con la paternidad. Me da un poco de miedo pero tengo familia que me ayuda: mi madre, mis hermanas, mis amigas, mis primas… Eso no me va a faltar”.

Con los 42 cumplidos hace poco tiempo y con dos estrenos, el profesional y el personal, que coinciden en el tiempo este cantaor de aire tímido y maneras amables que nació en Barcelona sólo puede dar gracias. La vida parece generosa con él: “Tampoco tengo 60 ni 70 años. Estoy en una etapa en la que me toca trabajar. Sin embargo, es cierto que esta es una profesión cansada. No sólo consiste en llegar, cantar y volverte al hotel. Pero la gente, la familia y los amigos me dan fuerzas. Es lo que yo elegí y no sé hacer otra cosa”, dice con un brillo en los ojos.

Aunque a Poveda no le cuesta trabajo hablar de esos ‘dos partos’ que lo colman de felicidad sí que aclara que el método elegido para ser padre no es el que se ha publicado en algunos medios. Él se niega a llamarlo vientre de alquiler. “Yo no he alquilado nada. No tengo alquilado ni un piso. Se trata de una gestación subrogada que he hecho en Estados Unidos. En este país hay un gran desconocimiento sobre el tema. Es una necesidad espiritual muy intensa la de ser padre como para frivolizar con algo así. Es algo tan íntimo y tan hecho desde el amor que hablar de alquileres me parece nefasto”, confiesa a la hora de calificar esta práctica, ilegal en España, que se da cuando una mujer lleva el embarazo y da a luz a un bebé que pertenece a otros padres genética y legalmente.

Un verano con niño y conciertos

Recién estrenado como padre este verano, la gira que realizará y que comienza en Sevilla los días 18, 19 y 20 de junio lo llevará hasta el Teatro Real y hasta Pedralbes, en Barcelona. Será un tour intenso para promover un disco que descubre a un Poveda que intenta estar a la altura de las letras que conforman cada uno de los temas. Su orgullo por el resultado se extiende a los que han contribuido a hacerlo, desde el Pedro Guerra que le propuso el proyecto hace cuatro años al Juan Albert Amargós que ejerce de arreglista. “Me parece magistral todo lo que ha hecho. Estamos acostumbrados a un Amargós más sinfónico, más del mundo del jazz y aquí ha dado otro paso más. Ha hecho unos arreglos muy pop, muy rockeros y en definitiva todo lo que ha tocado me parece una delicia. La colaboración de Chicuelo me sitúa, por ejemplo, en mi parte flamenca y los sonetos en sí son una maravilla, incluso uno de Aute, que cuando Pedro Guerra le encargó un soneto dijo que no se le ocurría nada y el resultado va precisamente de eso, de cómo no se le ocurre nada”.

Y así, entre sonetos y poemas, Poveda se lanza a la aventura de estar a la altura de los grandes autores que invocará su voz. También a la de que no le pongan etiquetas. La suya es la de cantaor, pero aquellos que han seguido una carrera que empezó a gestarse hace 27 años saben que no es la única: “Aunque los que me siguen me ponen esa etiqueta saben que también he estado inmerso en cosas muy distintas: desde un disco de tangos en directo a otro de poemas en catalán, otro con una orquesta de cámara, otro de música contemporánea y cantando poemas de Alberti… He cantado con todo tipo de cantantes y artistas y también he hecho teatro. Sin embargo, no me molesta que me vean como cantaor porque es lo que soy realmente”.

Ahora sólo le queda esperar a ver los frutos del doble reto de lanzar un disco histórico y de ser padre, una etapa que el cantante parece estar preparado. Más allá de los que integran su disco, el mejor poema de su vida viene con un pan debajo del brazo.

Está de enhorabuena y hasta su mirada lo delata. Miguel Poveda estrena disco y, dentro de poco, este mes de mayo, también paternidad. Se le adivina la emoción al entrevistarle, ya que es amable pese a su cordialidad, se muestra discreto pero también deseoso de compartir un gran momento de alegría y de evolución vital. Por una parte, estrena su Sonetos y Poemas para la libertad, que reúne textos de Alberti, Lorca o Miguel Hernández en una confluencia de estilos única, y a eso se suma la realización de un deseo largamente acariciado por el cantante: el de ser padre. El método para serlo es (como él mismo aclara) una gestación subrogada a la que no quiere tildar de ‘vientre de alquiler’. “Lo de la paternidades un aliciente increíble porque se me han activado otros mecanismos a la hora de cantar”, nos confiesa en el hotel de Madrid en el que realizamos esta entrevista. Lo dice a pleno pulmón en una mañana que parece tan brillante como sus planes. “No soy el único artista que tiene hijos y tiene que compatibilizar su carrera con la paternidad. Me da un poco de miedo pero tengo familia que me ayuda: mi madre, mis hermanas, mis amigas, mis primas… Eso no me va a faltar”.

Música Flamenco