Pantoja disfrutará su primer permiso carcelario en mayo una vez cumplidos los requisitos

A finales de mayo, Isabel Pantoja tendrá su primer permiso carcelario. No será fruto de ningún trato de favor, ya que la cantante cumple con las condiciones que marca la ley para este tipo de salidas. Igual que le sucedió a Ortega Cano, hay tres requisitos que deben acatar los reclusos para que se les admita previamente la solicitud. Este procedimiento consiste en los siguientes puntos y debe constar a instituciones penitenciarias: pedir perdón, reconocer el delito y resarcir económicamente. No es necesario que Pantoja haga una declaración pública, a diferencia del torero, que sí lo hizo en su primera salida de la cárcel de Zuera cuando se excusó ante la familia Parra.

Lo más complicado para Pantoja es solucionar la parte económica y pagar la multa que le fue impuesta por valor de 1.147.148 euros. Una cantidad fraccionada que ella ha ido consignando según vencían los plazos aprobados por la Audiencia Provincial de Málaga. Hasta el momento, ha cumplido con tres pagos de 100.000, 47.148 y 200.000 euros.

La fecha aproximada en la que Pantoja saldrá por primera vez de la cárcel de Alcalá de Guadaira tras su ingreso el pasado 21 de noviembre de 2014 será a finales del mes de mayo. La cantante se reuniría con toda la familia en Cantora, lugar en el que puede mantener privacidad absoluta y donde también acudirían sus íntimos, que durante el tiempo que ha permanecido en la cárcel sólo reciben noticias a través de su hermano Agustín. En la finca vive también su madre, que quiere ir a ver a su hija y así se lo ha comunicado a ella misma, que hasta ahora ha preferido que no lo hiciese. Físicamente, la abuela de Kiko Rivera y Chabelita está delicada, pero es una mujer muy fuerte. Se quedó viuda joven y fue ella quien sacó a los hijos adelante hasta que Isabel empezó a ganar dinero.

Visitas muy meditadas

Según confirman desde el entorno de Pantoja, “el problema es el lío mediático que se pueda formar con las cámaras y la prensa. No anda bien y el paseíllo desde el aparcamiento hasta la puerta puede ser muy complicado. Pero ella insiste y dice que le da igual. La última palabra la tiene Isabel. Ya veremos qué pasa. A quien echa mucho de menos es a sus nietos. Le llevan fotos de los dos porque en los vis a vis no se pueden llevar los móviles”. En la última visita, Chabelita le comunicó a su madre la fecha en la que viajará a Honduras para participar en el programa Supervivientes. A Isabel Pantoja le preocupa que le suceda algún percance pero, por otro lado, sabe que es la manera de rentabilizar el hecho de ser un personaje televisivo. Otra de sus intranquilidades es saber quién se va a encargar del día a día de su nieto mientras la mamá este buscándose la vida en una isla remota

Como le ha sucedido a Ortega Cano, la Isabel de ahora no es como la de antes de su ingreso en prisión. Ha hecho su análisis de vida y participa en terapias alternativas que le sirven para acomodarse a la existencia dentro y, más adelante, fuera de la prisión. A pesar de algunos rumores no ha tenido líos con nadie, es participativa y tiene cualidades para la cerámica, trabajo que realiza en el taller al que se apuntó. Parece que uno de sus objetivos es fabricar una vajilla completa para Cantora.