Nieves Álvarez, al mal tiempo buena cara

Estrategia o no, a Nieves Álvarez el anuncio de su separación con Marco Severini la cogía en París, en la Semana de la Moda de Alta Costura. Allí, entre pasarelas y camerinos, podía ignorar las llamadas de las decenas de periodistas que querían contactar con ella para oír de su boca los motivos de la ruptura, y, de paso, sobrellevar con más entereza el que ya es uno de los peores momentos de su vida. “Lo estoy pasando fatal. No sé cómo se hacen estas cosas”, decía a Vanitatis la pasada semana.

Entonces la inminente separación con su marido ya era un secreto a voces y solo era cuestión de tiempo que cualquiera de los dos protagonistas lo hiciera oficial. Vanitatis desveló que estaban a punto de poner fin a su relación sentimental el 29 de junio y el bombazo generó la tensión necesaria para que solo ocho días después el matrimonio decidiese con la confirmación cortar de raíz las especulaciones que en torno a ellos se habían generado.

Esa parte, la de que se empiece a hablar de terceras personas como motivo principal de su separación, es la que más desagrada a Álvarez. Por eso, tras dejar claro que entre ella y Marco no se ha interpuesto nadie, puso rumbo a París para hacer de la capital francesa su refugio posruptura. Allí Nieves cambió el gesto cabizbajo que se le había podido ver en la boda de Torretta (el último evento al que acudió con su marido y que se celebró el pasado fin de semana), y ante los flashes galos ofreció una imagen mucho más natural y fresca.

Mensajes de apoyo de sus seguidores

Pero no solo ante los reporteros gráficos de la Semana de la Moda parisina Nieves ha posado sonriente. También lo ha hecho para sus seguidores virtuales, aquellos que la admiran como profesional y que no han dudado en mandarle mensajes de ánimo a su ídolo en esta dura etapa personal que le está tocando atravesar. “Acaban de anunciar tu separación. Lo siento mucho. A vivir el día a día con una sonrisa con tu gente más cercana”, le decían en uno de los comentarios.

Y es que a pesar de las sonrisas con las que posa en las fotos recientemente subidas a las redes sociales, sus seguidores creen que la procesión va por dentro.

Una procesión que Nieves ahora trata de disimular centrándose en su profesión. La modelo ha desfilado, como suele ser habitual, para su amigo Stéphane Rolland y momentos previos al desfile compartió con los suyos una imagen en la que se la veía muy feliz. En ella la top aparecía subida a la cama mientras hace una foto al reflejo de su imagen en el espejo. “A comerte el día. Esa es mi chica”, “Feliz día Nieves. Hasta en las situaciones más complicadas no pierdes la clase y la elegancia” o “Ánimo, tú puedes. La vida son etapas y ahora te toca cambio”, eran algunos de los comentarios que sus seguidores hacían a tan simpática foto.