Los dardos de Lucía, la hija de Cayetano Rivera, en las redes sociales

Una semana después de la boda de Cayetano Rivera y Eva González y con los novios disfrutando de su luna de miel en la otra punta del mundo, las reacciones al enlace se siguen sucediendo. Foco del interés mediático desde el viernes pasado es Lucía Rivera, la hija que el torero adoptó cuando se casó con Blanca Romero. A pesar de que era vox pópuli que la relación entre padre e hija era tensa e inexistente desde hace años y su presencia en la boda fue prácticamente descartada desde el primer momento, son muchos los que se preguntan cuáles han sido los motivos que han propiciado la ruptura total entre un padre y una hija. Entre los que son presos de esa curiosidad se encuentra el propio hermano del novio, Julián Contreras, que este viernes se sienta en 'Sálvame Deluxe' para hablar del enlace –dice que sintió discriminado– y de su acercamiento a su sobrina.

Consciente o no de esa expectación que ha generado su ausencia en la boda de su padre, Lucía Rivera vuelve a desatar la polémica con su último tuit. Un mensaje que para algunos usuarios de las redes sociales parece tener a Cayetano como principal destinatario. “No tengo tiempo para querernos más, hay demasiadas lágrimas secas en mis ojos como para poder seguir soportando este muro de carga que has construido sobre mi espalda. No tengo tiempo".

"O es que no quiero seguir creyendo que tú vas a sostenerme cuando me falten las fuerzas y las ganas. Cuando me venzan mis propias esperanzas y todo caiga sobre mí, lapidando las pocas cosas que aún guardo".

"No tengo tiempo porque sé que siempre llegas tarde, que tienes esa habilidad para destrozarme como nadie. Lo siento, pero no, no tengo”.

El mensaje de Lucía enseguida podía leerse también en el perfil de su madre Blanca Romero, quien precisamente solo horas antes había borrado un enigmático tuit en el que hacía referencia al abandono de menores. ¿Era ese tuit un dardo envenenado para Cayetano? ¿Es también el mensaje de Lucía una declaración de intenciones hacia su padre?

Lejos de la cordialidad de antaño

Cuando Blanca Romero y Cayetano Rivera se separaron solo tres años después de su boda en Gijón, la suya fue una de las rupturas más modélicas que se recuerdan en el 'cuore' patrio. Ni críticas ni reproches entre un matrimonio que guardó todas las formas por la hija que tenían en común. Por entonces Cayetano siguió muy pendiente de Lucía y eran frecuentes las visitas del torero a la pequeña en la capital. Sin embargo, pocos años después las cosas se torcieron. Blanca pidió la nulidad matrimonial al diestro y este se negó en rotundo para solo un año después ser él el que solicitase lo mismo a la modelo. La miss Eva González ya había entrado en su vida y las prisas apremiaban.

Desde entonces nada volvió a ser como era y la expareja terminó en el juzgado, eso sí, sin reproches públicos. En eso siempre fueron cordiales.

Al final la nulidad llegó, aunque después de un enfado descomunal de la asturiana, que nunca estuvo de acuerdo con las estrategias de su exmarido para conseguirla. A partir de aquel momento sus diferencias también empezaron a repercutir en Lucía, cuyas citas con su padre cada vez se espaciaban más en el tiempo. Tanto que dejaron de verse. Sin más.

Julián Contreras se ha interesado esta semana para ver qué ha llevado a la joven a no acudir a la boda de su padre, pero no parece que esa mediación haya servido de mucho. El mensaje de Lucía Rivera solo dos días después parece claro. No tiene más tiempo.

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