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Ana Boyer sobre Vargas Llosa: “Es encantador conmigo y encima hace feliz a mi madre”
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YA HAN HABLADO DE BODA

Ana Boyer sobre Vargas Llosa: “Es encantador conmigo y encima hace feliz a mi madre”

La pequeña de la saga Preysler no se esconde ante las preguntas. Habla del novio de su madre, de su relación con Fernando Verdasco y lo desordenado que es, de sus hermanos y de lo mucho que echa de menos a su padre, Miguel Boyer

Foto: Ana Boyer durante el acto de la firma Caramelo (Gtres)
Ana Boyer durante el acto de la firma Caramelo (Gtres)

Ana Boyer sabe que las preguntas relacionadas con el noviazgo de su madre, Isabel Preysler, y Mario Vargas Llosa son obligadas cuando acude a un 'photocall'. La pequeña de la saga Preysler no las evade y contesta con naturalidad tanto a estas cuestiones como a las de su futura boda con el tenista Fernando Verdasco o las referidas a su convivencia con él. No pudo viajar a Miami para compartir el Dia de Acción de Gracias con sus hermanos, pero sí lo hará estas Navidades cuando todos viajen a Estados Unidos. Asegura que le gustaría que sus hermanos Julio José y Enrique la hicieran tía, y de Tamara que “aún tiene mucho tiempo por delante para echarse novio” . Echa mucho de menos a su padre, del que recuerda “lo cariñoso y bueno que era conmigo”. De sus otros hermanos, Miguel y Laura, explica que “los veo muy poco”.

Pregunta: Decía el otro día Fernando que no paráis, que él tiene muchos viajes y que tú estás también todo el día trabajando.

Respuesta: Sí, la verdad es que no tenemos los horarios combinados, pero, bueno, nos vamos adaptando.

P: ¿Cómo llevas la distancia?

R: Al principio de la relación me costaba mucho y no he tenido más remedio que acostumbrarme a las ausencias. Es durísimo. Pero cada vez que Fernando tiene un poco de tiempo intenta volver para que estemos juntos. Buscamos huecos como podemos. Aprovechando muy bien los fines de semana.

P: ¿Por fin la casa montada? Fernando comentaba que os faltaban aún muchas cosas.

R: Estamos en proceso, lo que pasa es que se tarda un montón de tiempo en decorar una casa. La tenemos a medias y con el salón vacío. Los muebles van llegando poco a poco. Es una casa alquilada. Por ahora no tenemos proyecto de comprar una.

P: ¿Tuvo que ver algo el romance de tu madre con Vargas Llosa con la decisión de irte a vivir con Fernando?

R: No, quéva. Lo habíamos pensado desde hace tiempo. Simplemente decidimos dar el paso y coincidió. No hay que buscar otras lecturas.

P: ¿Cómo te llevas con Mario?

R: Pues muy bien. Conmigo siempre ha sido encantador, es estupendo. Y lo más importante, veo a mi madre feliz.

P: ¿Qué va a ser primero, tu boda o la de tu madre?

R: Ya me lo han preguntado y digo que por mi parte hay que esperar. Queréis precipitar demasiado las cosas, no hay fechas para nada de eso.

P: ¿No te hace ilusión casarte?

R: Sí, claro. Lo único que todavía no ha llegado el momento.

P: ¿Pero habéis hablado de ello?

R: Hombre, cuando estás con una persona bien y llevas más de dos años, pues claro que hablas de esas cosas.

P: ¿Tu madre os ha hablado en algún momento de sus planes de boda?

R: Todavía no. Lo hará cuando tenga que ser y tomen la decisión definitiva.

P: ¿De tus hermanos quién va a ser el primero que tenga niños?

R: Mira, eso me encantaría saberlo. Cualquiera de los dos me vale. Yo estoy deseando que ellos tengan hijos. Ellos, ¡no yo! (risas).

P: Esta Navidad serán las segundas sin tu padre. Serán un poco triste…

R: Seguro, obviamente. Pero yo creo que eso pasará por lo menos un par de Navidades más. Y estaré eternamente agradecida a todas esas personas que cuando murió dijeron cosas bonitas de él y de su figura en la vida política de España. Fue muy reconfortante.

P: ¿Qué es lo que más recuerdas de tu padre?

R: Pues muchísimas cosas. Lo cariñoso que era conmigo, lo que me cuidaba y que aprendía algo de él todos los días. Le echo muchísimo de menos.

P: ¿Qué relación tienes con tus hermanos por parte de padre?

R: Nos vemos poco. Tengo una relación más intensa con mis hermanos por parte de madre, pero muy buena con todos. Con Enrique un montón.

P: ¿Tú también tienes tu lado artístico?

R: En absoluto. Eso viene por el lado lglesias. Ni cantoni bailo.

P: Tu hermana Tamara parece que es la única que quiere casarse en tu familia, ¿por qué no le presentas a algún amigo?

R: No arranca, no arranca. A Tamara le hacen ilusión esas cosas, pero no ha encontrado aún a la persona adecuada. Pero estoy segura de que laencontrará. Cada cosa a su tiempo, es muy joven todavía.

P: ¿Qué tal lleváis el reparto de tareas en casa?

R: La verdad es que no cocinamos mucho ninguno de los dos, perosi hay que escoger a uno, lo hago yo mejor, pero tampoco vamos los dos muy allá.

P: ¿Lo mejor y lo peor de la convivencia?

R: Lo mejor es que nos vemos mucho más, y eso ayuda un montón teniendo en cuenta las dificultades que tenemos para vernos con sus viajes. Lo peor... que es un pelín desordenado. Yo soy más ordenada. En casa, por ejemplo, discutía con Tamara porque en ese sentido era un desastre.

P: ¿En Nochebuena os vais a reunir todos, en Madrid o en Miami?

R: Todavía no está muy claro si en España o fuera. Nos tenemos que ajustar todos. Lo único que es seguro es que estaremos juntos. Chábeli ha venido a Madrid y no tiene claro si se queda aquí o vamos nosotros a su casa.

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Ana Boyer sabe que las preguntas relacionadas con el noviazgo de su madre, Isabel Preysler, y Mario Vargas Llosa son obligadas cuando acude a un 'photocall'. La pequeña de la saga Preysler no las evade y contesta con naturalidad tanto a estas cuestiones como a las de su futura boda con el tenista Fernando Verdasco o las referidas a su convivencia con él. No pudo viajar a Miami para compartir el Dia de Acción de Gracias con sus hermanos, pero sí lo hará estas Navidades cuando todos viajen a Estados Unidos. Asegura que le gustaría que sus hermanos Julio José y Enrique la hicieran tía, y de Tamara que “aún tiene mucho tiempo por delante para echarse novio” . Echa mucho de menos a su padre, del que recuerda “lo cariñoso y bueno que era conmigo”. De sus otros hermanos, Miguel y Laura, explica que “los veo muy poco”.

Mario Vargas Llosa
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