Borja Thyssen y Blanca Cuesta se refugian de sus problemas con Hacienda en un cirujano plástico

Parece que Borja Thyssen no está muy preocupado por los dos procedimientos que ha emprendido Hacienda contra él por fraude fiscal. El hijo de Carmen Thyssen, para quien la Abogacía del Estado solicita hasta tres años a la cárcel por defraudar unos 630.000 euros al fingir supuestamente que vivía en Andorra, parece ajeno a cualquier preocupación y se deja ver fuera del principado sin ningún complejo. Lejos de esconderse, al joven se le ha visto paseando de la mano de su mujer, Blanca Cuesta, por las calles de Madrid.

Como muestran las imágenes exclusivas de Vanitatis, la pareja ha visitado al cirujano plástico Enrique Monereo. Juntos, de la mano, y ella con gafas de sol, el matrimonio abandonaba la clínica del doctor y prefería no hacer comentarios al respecto de sus problemas con el fisco. El doctor Monereo es el cirujano plástico de muchas de nuestras 'celebrities'.

En esta ocasión el hijo de la baronesa Thyssen no ha pedido a los fotógrafos que no le hicieran fotos. No fue así hace un año cuando le 'cazaron' en Barcelona: “Por favor, por favor… no me hagáis fotos, que para Hacienda vivo en Andorra”. Borja Thyssen recibió así a un grupo de periodistas. Fuentes conocedoras del procedimiento explican a El Confidencial que Hacienda acusa a Thyssen de no tributar en España por sus múltiples ingresos de ese año, que incluyen los 300.000 dólares de adelanto del pacto de Basilea, el acuerdo que establecía el reparto de la herencia del barón Thyssen.

Recordar que para ser residente fiscal en el extranjero hay que pasar más de 183 días fuera de España.