Mario Casas, algo más que un guaperas que se quita la camiseta
El actor habla de cómo ve su carrera ahora que parece estar saliendo de su encasillamiento. También de familia, de amigos, de planes de futuro con Berta y más
Mario Casas ya no quiere ser ese chico guapo que las trae a todas de calle y que triunfa en el cine y la televisión gracias a quitarse la camiseta en cada escena. Ahora ha madurado, tiene un perfil más maduro y los papeles que realiza ya no caen tanto en los clichés adolescentes. Quizá sea porque está a punto de cumplir los 30 años y tras años luchando por labrarse un futuro en un mundo tan complicado como el de la interpretación, finalmente ha encontrado su hueco. Así lo explica él mismo en una entrevista concedida a la revista digital 'Mine': “Esta es una profesión de lucha constante y de reinventarme todos los días. En esta película quería trabajar muchísimo para por lo menos intentar estar a la altura de José Sacristán y Luis Tosar. Tenía que conseguir, que si ellos están en un 10, yo por lo menos a un 6 o un 7”, asegura el actor, que se encuentra inmerso en la promoción de su próxima película, 'Toro'.
Mario comprende las críticas a su trabajo ahora que las analiza desde la distancia. Cuando comenzó su andadura profesional muchos le acusaban de estar encasillado, algo que le tenía preocupado: “Quizá lo pasé peor cuando estaba empezando, porque resulta duro darte cuenta de que no puedes gustar a todo el mundo y que tu trabajo no llega a todas las personas, pero estoy orgulloso de ser una personas que se deja la vida en todos los proyectos”.
No ocurre lo mismo a nivel personal. Reconoce estar donde siempre ha estado, con los pies en la tierra y que eso no va a cambiar: “Uno cambia, porque no es lo mismo estar en un sitio u otro. Pero mis amigos son los mismos de cuando tenía ocho años y tampoco me han dicho nunca que soy otra persona”, reconoce el actor a 'Mine', que viene de una familia numerosa. La misma que le gustaría formar a él con Berta Vázquez.
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Mario Casas ya no quiere ser ese chico guapo que las trae a todas de calle y que triunfa en el cine y la televisión gracias a quitarse la camiseta en cada escena. Ahora ha madurado, tiene un perfil más maduro y los papeles que realiza ya no caen tanto en los clichés adolescentes. Quizá sea porque está a punto de cumplir los 30 años y tras años luchando por labrarse un futuro en un mundo tan complicado como el de la interpretación, finalmente ha encontrado su hueco. Así lo explica él mismo en una entrevista concedida a la revista digital 'Mine': “Esta es una profesión de lucha constante y de reinventarme todos los días. En esta película quería trabajar muchísimo para por lo menos intentar estar a la altura de José Sacristán y Luis Tosar. Tenía que conseguir, que si ellos están en un 10, yo por lo menos a un 6 o un 7”, asegura el actor, que se encuentra inmerso en la promoción de su próxima película, 'Toro'.