Es noticia
Menú
Carlos Raluy, del circo familiar a relanzar el London Bar, reducto canalla de Barcelona
  1. Noticias
UN CIRCO CON ALTOS INGRESOS

Carlos Raluy, del circo familiar a relanzar el London Bar, reducto canalla de Barcelona

A sus 72 años, hereda el local en el que su padre decidió enrolarse en el circo. La empresa familiar factura más de medio millón al año aunque casi no tiene beneficios netos

Foto: Carlos Raluy en un fotomontaje realizado en Vanitatis.
Carlos Raluy en un fotomontaje realizado en Vanitatis.

El London Bar es uno de los pocos locales de la Barcelona canalla que siguen en pie. Ubicado al final de las Ramblas, había sido un local frecuentado por personajes como Dalí, Hemingway y Picasso, nombres que dieron paso a otros como Juan Perro y Juan Marsé. En una Barcelona atestada de turistas, donde uno puede ver cómo lo que era una tienda de esas de toda la vida se convierte en un local de una cadena cualquiera con tan solo un parpadeo, la supervivencia del London Bar parecía imposible. Pero apareció un soñador y todo cambió. Eli Beltrán, la propietaria, falleció el año pasado y un amigo, Carlos Raluy, ha decidido quedárselo. Su nombre ha aparecido en la prensa estos días, recordando siempre su pertenencia a la familia circense. Pero ¿quién es Carlos Raluy?

placeholder Los hermanos Carlos y Luis Raluy durante una actuación.
Los hermanos Carlos y Luis Raluy durante una actuación.

Lluís Raluy Iglesias, padre de Carlos y de sus hermanos Lluís, Francis y Eduardo, solía frecuentar el London Bar en su adolescencia, un local convertido en punto de encuentro entonces de artistas del circo. No era artista de circo, pero le gustaba la gimnasia y era un hombre corpulento e inquieto. Hablamos de los años 30, tiempos en el que las oficinas de agentes y propietarios de carpas circenses se concentraban en esa zona, lo que propiciaba que el London fuera famoso. Lluís Raluy no era artista, era tan solo un tipo corpulento y aficionado a la gimnasia que se embobaba con las conversaciones y las juergas que se sucedían en el London.

placeholder Carlos Raluy, del Circo Histórico Raluy, en el interior del London Bar. (Foto: Jesús M. Atienza)
Carlos Raluy, del Circo Histórico Raluy, en el interior del London Bar. (Foto: Jesús M. Atienza)

Y así, se enteró de que un grupo de acróbatas, Los Keystone, buscaban a un nuevo miembro. Lluís Raluy Iglesias dejó la fábrica, hizo las maletas y se añadió a Los Keystone, contrato con el que empezó una de las sagas circenses más importantes de España y de Europa. El Cirque d’Hiver de París, al Cirque Bouglione, el circo Chipperfield (Inglaterra)... Y ahora, el London Bar, donde empezó todo y donde esperan que continúe. Porque Carlos Raluy instalará las oficinas del Circo Histórico Raluy en el local, un espacio protegido por el Ayuntamiento de Barcelona por su valioso patrimonio histórico —la fachada, la barra del bar, el espejo modernista…—.

Foto:  Leones en una jaula de un circo. (EFE)

La empresa Circo Histórico Raluy es rentable y puede hacerse cargo del London Bar sin problemas. El circo se creó en 1983 a partir de una idea original que el director de la compañía, Carlos Raluy, tuvo en 1976. La compañía sigue fiel al proyecto inicial que ahora tiene continuidad con el Circo Histórico Raluy. Antes de la separación para iniciar nuevos proyectos, la facturación de la antigua empresa Circo Raluy SL fue de 658.288, según las últimas cuentas presentadas, las de 2014, y los beneficios netos no pasaron de los 156 euros.

El Ministerio de Educación les concedió una subvención de 23.500 euros en 2015, según el Portal de la Transparencia, lo que les ayuda a mantenerse a flote. La empresa, con 30.000 euros de capital social, está radicada en L’Aldea, un pueblito de Tarragona, donde vive Carlos Raluy.

Desde allí, a sus 72 años, deberá gestionar ese bar canalla en cuyo espejo se han visto reflejados desde personas como Dalí hasta Juan Perro. Todo, porque allí empezó la historia de su familia circense. Puro romanticismo.

¿Tienes un dispositivo móvil iOS o Android? Descarga la APP de Vanitatis en tu teléfono o tablet y no te pierdas nuestros consejos sobre moda, belleza y estilo de vida. Para iOS, pincha aquí, y para Android, aquí.

El London Bar es uno de los pocos locales de la Barcelona canalla que siguen en pie. Ubicado al final de las Ramblas, había sido un local frecuentado por personajes como Dalí, Hemingway y Picasso, nombres que dieron paso a otros como Juan Perro y Juan Marsé. En una Barcelona atestada de turistas, donde uno puede ver cómo lo que era una tienda de esas de toda la vida se convierte en un local de una cadena cualquiera con tan solo un parpadeo, la supervivencia del London Bar parecía imposible. Pero apareció un soñador y todo cambió. Eli Beltrán, la propietaria, falleció el año pasado y un amigo, Carlos Raluy, ha decidido quedárselo. Su nombre ha aparecido en la prensa estos días, recordando siempre su pertenencia a la familia circense. Pero ¿quién es Carlos Raluy?

Barcelona Tarragona
El redactor recomienda