Los Franco venden ahora una casona asturiana por 5 millones
Minetras sobre el pazo de Meirás y el palacio de Cornide planea la Xunta de Galicia, se lanzan ahora a vender otro inmueble
"Los Franco llaman a la finca la Casina' y, hasta ahora, la única hija del general la conservaba porque quería mantener vivo el recuerdo de sus padres", explica Antonio Avilés a 'El Comercio', que, además de responsable de la inmobiliaria de lujo Mikeli, que está comercializando también el pazo de Meirás, se declara amigo de la familia. Ese es el precio con el que acaba de salir a la venta La Piniella, la finca asturiana de la familia Franco, que, poco después de la muerte de la matriarca del clan, Carmen Franco Polo, ha puesto en el mercado inmobiliario esta propiedad, con el mismo aire desvencijado que otras más mediáticas, ubicada en la localidad de San Cucao (Llanera).
Según la inmobiliaria, la propiedad que ahora sale a la venta -y que se incorpora a la retina de los españoles con Meirás, el palacio de Cornide y los pisos de la madrileña calle de Hermanos Bécquer- es una familiar heredada por la mujer de Franco, Carmen Polo Martínez-Valdés. "En concreto, por parte del linaje Martínez-Valdés, que en los padrones llanerenses del siglo XVII tienen consideración de hijosdalgos notorios. Una rama que nunca vio con buenos ojos el noviazgo de la ovetense con el Comandantín", apunta esta empresa.
¿Hipotética venta?
Un anuncio rodeado de polémica, ya que la Diputación de A Coruña ha exigido a la Xunta de Galicia que inicie "de forma inmediata" un expediente sancionador contra los herederos por desoír las advertencias de que no puede vender ese emblema del patrimonio gallego, como ya contamos en Vanitatis. Por el momento, sin resultados, ya que los siete hijos de la difunta duquesa de Franco siguen sin darse por aludidos. Carmen Martínez-Bordiú, la más mediática, sigue sin hacer declaraciones.
Como ha publicado la prensa gallega, el conselleiro de Cultura, Educación y Ordenación Universitaria, Román Rodríguez, considera que las informaciones sobre una "hipotética venta" del pazo de Meirás de Sada son un "globo sonda" de los herederos de Franco, propietarios de este inmueble distinguido como Bien de Interés Cultural (BIC) en 2011. En este sentido, ha pedido que "ninguna institución caiga en la trampa" de pagar para adquirir el bien.
Carmen tiene una excelente relación con esta inmobiliaria que también es muy fuerte en América. Este pasado julio acudió a un evento organizado por la misma, junto con el cónsul de Guatemala y los consulados representativos de México, Costa Rica y Colombia. La buena relación con Avilés la llevó, sin duda, a decidir que sería Mikeli el lugar a través del cual los Franco darían salida a su patrimonio inmobiliario.
Joyas y alta costura
La venta de todo el patrimonio familiar incluye incluso la parte más privada como son los vestidos de alta costura de grandes modistos nacionales como Balenciaga, Pedro del Hierro, Elio Berhanyer y diseños internacionales de los años cincuenta y sesenta. Verdaderas joyas que podrían ser adquiridas por los museos correspondientes de las firmas.
De hecho, el Palais Galliera en París abrirá una sala permanente con el nombre de Gabrielle Chanel y la idea es recuperar muchos de los vestidos de alta costura de aquellos años. Tomen nota.
"Los Franco llaman a la finca la Casina' y, hasta ahora, la única hija del general la conservaba porque quería mantener vivo el recuerdo de sus padres", explica Antonio Avilés a 'El Comercio', que, además de responsable de la inmobiliaria de lujo Mikeli, que está comercializando también el pazo de Meirás, se declara amigo de la familia. Ese es el precio con el que acaba de salir a la venta La Piniella, la finca asturiana de la familia Franco, que, poco después de la muerte de la matriarca del clan, Carmen Franco Polo, ha puesto en el mercado inmobiliario esta propiedad, con el mismo aire desvencijado que otras más mediáticas, ubicada en la localidad de San Cucao (Llanera).