Personalidades de la vida artística, social y empresarial, en la fiesta del verano

Cari Lapique, con su hija, Carla Goyanes y el marido de esta, Jorge Benguría; Fiona Ferrer, Begoña Trapote y sus sobrinas Micaela y Lucía, el director de la Casa de America, Oscar Dávila, Carmen Lomana, Pedro Pérez, Sonia Mompó, empresaria y dueña de la firma de arte floral "Detalles de Sonia Mompó", el doctor y especialista en estética Julio Navarro, Paloma Lago, el experto en moda Jousi, Alejandra Rojas, Sandra García-Sanjuán, Mónica Silva y María Flores, fueron algunos de los personajes conocidos que acudieron al concierto de Pablo López, invitados por Vanitatis, que celebraba con el cantante de moda su nueva andadura como medio referente de 'life style'.

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Acudieron al concierto en La Cantera de Nagüeles, donde desde hace ocho años se celebra el festival Starlite, punto de encuentro de las galas musicales y el ocio de Marbella. En los años 80 este espacio lo inauguraron Plácido Domingo y Julio Iglesias por iniciativa del príncipe Alfonso Hohenlohe, que, al no recibir ningún apoyo por parte del Ayuntamiento y la Junta de Andalucía, quedó en desuso.

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Tras los brindis de rigor, los invitados pasaron a la zona VIP para escuchar al cantante malagueño, que demostró esa noche por qué se ha convertido desde que participó en la edicion 2008 de Operación Triunfo en un referente musical. Una semana antes ya no había localidades y hubo seguidores que accedieron a Starlite para escucharlo, aunque no pudieran verlo directamente sino a través de las pantallas que hay en la zona de los restaurantes y bares de copas.

La mayoría de los invitados de Vanitatis conocían sus canciones y las coreaban. Para los que escuchaban por primera vez a Pablo López esa noche se convirtieron en incondicionales. Regaló varias canciones y tuvo un recuerdo especial para su madre que se encontraba entre el publico. Recordó sus raíces y sus comienzos: "Quién me iba a decir a mí que tocaba el piano en los hoteles de Estepona para los turistas que estaría aquí ante vosotros. Era un sueño inalcanzable. Por eso os digo: perseguid vuestros sueños".

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Fiona Ferrer explicaba cómo había sido hace dos veranos su encuentro con Pablo: "Organicé una cena solidaria para la fundación Juegoterapia, lo invité y vino encantado. Es una persona muy generosa y cariñosa. Lo senté al lado de Sandra Garcia-Sanjuán y charlaron de lo difícil que resultaba para los que empezaban a actuar en grandes espacios. En un momento de la cena le dijo: Sandra algún día lo conseguiré. Y, efectivamente, así ha sido"

Muy emocionado se secó las lagrimas y cantó a capella acompañado de su piano. Una noche mágica para los asistentes y, sobre todo, como punto de partida para la nueva andadura de Vanitatis, que a sus siete años de vida cuenta con el mejor y más compacto equipo de profesionales.