Novias de 2021, los expertos aseguran que estas son las tendencias

Si juntas a dos diseñadores de trajes de novia, un fotógrafo y una experta en invitaciones de boda a tomar un café virtual organizado por Carolina Herrera, solo puedes esperar una cosa, aprender mucho sobre bodas y salir con tu agenda nupcial repleta de tips. Todo comenzó con Alexis Bennett, editora de moda y una de esas novias que eligió el 2020 para casarse porque le parecía una fecha muy especial. Una pandemia después, Alexis se casaba el 14 de febrero de 2021 y su experiencia como novia de la nueva normalidad ponía de acuerdo a los expertos invitados a la charla: ahora lo importante solo son los novios, los invitados se tienen que adaptar.

Las pocas normas no escritas que quedaban en la mente de los organizadores, novios y asistentes a bodas han desaparecido de un plumazo. Agendar es importante y la intimidad aún más, pero que hayamos pasado un año recluidos en casa no ha desanimado a quienes se tienen que casar en 2021 o 2022, sino que ahora tienen más ganas de celebrar que antes y no hay límites. Jung Lee y Mark Ingram, reconocidos diseñadores de trajes de novia, apuntaban que los vestidos de novia no han cambiado ni se han hecho más sencillos, que el único cambio en sus atelieres ha sido el escenario en el que iba a tener lugar el enlace y las dimensiones de este.

Alexis, por su parte, como novia que vio cómo su boda se aplazaba en varias ocasiones, tenía muy claro que no iba a renunciar al diseño, pero lo que sí iba a ser era mucho más cómodo. “La gente pasa mucho tiempo en su casa, así que cuando sale, se viste de verdad y se quiere divertir”, aseguraba la novia, que apuntaba a los accesorios llamativos como una tendencia cada vez más repetida. Alexandra Michler, directora de iniciativas fashion de 'Vogue', señalaba a este respecto a la nueva colección bridal de Carolina Herrera: “Ahora vemos que las novias se divierten más, vemos más colores”.

Mark Ingram, a su vez, apuntaba que las novias de 2021 piden detalles muy elaborados y de calidad; al haber menos celebraciones, saben que se las va a mirar más. Sin embargo, en el otro lado tenemos a las madrinas y a las damas de honor, en las que los vestidos casual y elegantes son los más demandados: “Se buscan diseños más adaptados al cuerpo, es importante la comodidad”.

Otra curiosa irrupción en las tendencias en los trajes de novia es ese regreso a la regencia. La influencia de ‘Los Bridgerton’ ha hecho que los vestidos más bucólicos y marcados en el pecho o con bordados sean una romántica tónica. Pero, además, los accesorios capilares respiran el mismo estilo. Turbantes y diademas han vuelto con fuerza, despertando el toque isabelino de las novias.

Detalles ‘wedding planner'

Pero qué ocurre con el resto de tareas que organizar antes de una boda, qué hay del menú, del lugar, de las invitaciones… El fotógrafo nupcial John Cain subrayaba un radical cambio en la puesta en escena de las bodas: “Puede que no tengamos esas fotos dramáticas de salas llenas de gente, pero ahora lo importante es solo la pareja”. El número de bodas que este afamado fotógrafo amontonaba en su agenda se ha visto drásticamente reducido y ahora, una vez más, lo importante son los detalles, las miradas de los novios, una caricia, un momento de intimidad.

El lugar de la celebración también se ha visto modificado por exigencias del guion. Un núcleo más cercano de invitados, menos personas y espacios ampliamente ventilados han hecho que las fincas de celebraciones o los grandes salones pasen a ser el hogar familiar o escenarios al aire libre. La diseñadora Jung Lee resaltaba en la charla un detalle curioso, la limitación horaria. Los toques de queda y demás medidas han hecho que las bodas vayan con un contador, así que todo se condensa, la gente quiere atesorarlo todo y hasta el más mínimo detalle tiene que estar cuidado y ser especial.

Caroline Harding-Gelbard, experta en las más elegantes y personalizadas invitaciones de boda, ponía su granito de arena a la charla nupcial explicando que, también como consecuencia de todas las obligadas medidas de seguridad, las invitaciones tenían ahora que reunir mucha más información. “El diseño sigue siendo muy cuidado, priman los tonos verdes y las composiciones florales; sin embargo, ahora las invitaciones son más interactivas”. Los formalismos han dejado paso a las normas y a la exigida confirmación para cumplir con todos los protocolos.

Novias más divertidas, bodas más íntimas y detalles mucho más cuidados. Casarse en 2021 seguirá siendo todo un reto.