En coche, en bici, a caballo... 4 originales formas de llegar a tu boda

Una boda conlleva un sinfín de preparativos: desde el lugar en el que se celebrará la ceremonia al vestido de novia, pasando por otros aspectos como la decoración, la iluminación e incluso, la paleta cromática del evento. Sin embargo, a veces no se tienen en cuenta ciertas cosas y solo caemos en ellas, horas antes de que tengan lugar. Ante esto, lo mejor es hacer una lista que reúna todo lo imprescindible para el gran día, por ejemplo, el transporte con el que los novios llegarán al enlace.

Si bien es cierto que el novio suele llegar en coche acompañado de sus familiares más cercanos e incluso, junto con el resto de invitados, la llegada de la novia y su entrada en la ceremonia suele ser más especial. Por esta razón, a menudo se emplean diferentes métodos más vistosos u originales como puede ser un coche antiguo o un carruaje de caballos. Este transporte además, será el que lleve a los recién casados al sitio en el que se llevará a cabo el banquete.

1. El clásico coche

Muchas parejas deciden incluir en el presupuesto de su boda, el alquiler de un coche clásico -descapotable o no- que de ese toue especial al enlace. Las posibilidades son tantas como coches hay disponibles (Mercedes 300 Adenauer Mercedes 220 Ponton Mercedes Clase S Rolls Royce Silver Shadow II...) y se pueden contratar con o sin conductor.

De la misma manera, hay quienes prefieren optar por la opción opuesta y en vez de alquilar coches antiguos, prefieren vivir la experiencia de montarse en una limusina o un modelo deportivo actual, completamente lujoso y al que no le falte detalle para empezar la fiesta desde el momento en el que se suban a él.

2. Transporte a caballo

Los carruajes de caballos son una opción absolutamente mágica y romántica. Especialmente populares en el sur de nuestro país, la tradición anima a que muchos novios opten por este tipo de transporte en su gran día, dando como resultado un álbum de bodas diferente y muy significativo.

Más especial todavía es cuando los novios sienten especial devoción por este animal, suelen montar a caballo habitualmente y deciden tomar las riendas ellos mismos para trasladarse del lugar de la ceremonia al enclave en el que se celebra la fiesta y la sesión fotográfica que, sin duda, con la aparición del caballo será única.

3. Diversión en bicicleta

Cuando el sitio en el que los novios se dan el "sí, quiero" no está muy alejado de la finca en la que celebrarán la boda (a veces incluso dentro del mismo enclave) es especialmente divertido que los protagonistas se muevan en bicicleta, sobre todo, si son las de estructura clásica y van decoradas con algún tipo de cartel con el emblemático "recién casados".

Igual que sucede con el caballo, la bicicleta puede ser un elemento de atrezo ideal para la sesión fotográfica poniendo un toque de originalidad a las fotografías que, sin duda, serán del todo divertidas.

4. Novios motorizados

Tanto si los novios son una pareja aficionada a las motos como si no, llegar a la boda en este tipo de transporte tiene un encanto especial. Como ocurre en el caso de los coches, lo ideal es alquilar modelos clásicos como puede ser una Vespa o una emblemática Harley-Davidson. También existe la opción de hacerlo en sidecar, algo todavía más original.

Para bodas en la playa, no hay que descartar opciones tan sorprendentes como una moto acuática, una lancha o incluso, un velero pequeño. Sin duda, dejarás boquiabiertos a todos tus familiares y amigos cercanos.