La novia francesa que se casó con un vestido original de John Galliano de los 90

Desde un principio la diseñadora de moda y estilista francesa Sabina Socol sabía que no quería ni una boda común y corriente, ni un vestido de novia tradicional. Con esa idea como base, Florian, que así se llama su marido, y ella, comenzaron a organizar su enlace soñado, una gran fiesta donde reunir a sus familiares y amigos y celebrar su amor por todo lo alto, y en la que un vestido lencero de John Galliano de los 90 sería la estrella.

En enero de 2020, justo antes de la pandemia, la pareja se comprometió y de inmediato se marcó una fecha, junio de 2021, y un lugar, la Toscana. Sin saber que unas semanas después el coronavirus iba a cambiarlo todo, su mente estaba fijada en ese mes y ese año concreto y siguieron en marcha con sus planes a pesar de la incertidumbre que la epidemia estaba dejando a su paso.

El 11 de junio de 2021 llegó su ceremonia civil en París. Acompañados únicamente de sus padres y testigos, Sabina y Florian se dieron el 'Sí, quiero' formal que así se exige en Francia como paso previo e imprescindible a cualquier boda.

Para esta ocasión la novia se decantó por un vestido midi con el siempre acertado y atemporal estampado 'toile de jouy' en blanco y azul, un bonito modelo de tirantes anchos, escote recto, silueta ajustada y abertura lateral firmado por la marca francesa Miaou y que Sabina acompañó con accesorios de color blanco.

Como hemos adelantado, solo el entorno más cercano estuvo al lado de los novios en su boda civil, los dos querían esperar y reservar el gran acontecimiento dos semanas después en la Toscana y allí sí que reunir a todos sus familiares y amigos. Ese día llegó, con 79 invitados y un campo de trigo como telón de fondo, Sabina y Florian consiguieron celebrar su boda.

Al caer la tarde y rodeados de una belleza idílica, un escenario con el que la diseñadora francesa siempre había imaginado casarse tras viajar a la Toscana en su treinta cumpleaños y que hoy nos deja unas estampas que hablan por sí solas.

No hay boda viral sin un vestido también viral y el que escogió Sabina esconde una historia que merece la pena descubrir. Apasionada de la moda de la década de los 90, insistimos, ella no quería un modelo encorsetado con los típicos ingredientes que se presuponen en un look nupcial, quería ser fiel a su estilo y al tiempo, marcar la diferencia.

Tras algunos intentos de compra fallidos, a Sabina se le ocurrió la idea de acudir a 'La Mode Vintage', una tienda con ropa y complementos de otras épocas, vamos, una tienda vintage, propiedad de una amiga y ubicada a escasos metros de su domicilio. Allí entre tanta montonera de prendas detectó un vestido lencero que apuntaba maneras, aun así, en ese primero momento no se decidió a comprarlo y regreso a casa.

Fue ya en su piso cuando de pronto tuvo una revelación: el vestido le sonaba, pero no sabía de qué ni el cuando. Revisando desfiles de los años 90 descubrió dos cosas. La primera, que se lo había probado al revés, y la segunda, que se trataba de un diseño con el que Naomi Campbell desfiló para John Galliano y que pertenecía a su colección de primavera-verano de 1996.

Rápidamente regreso a la tienda de su amiga, eso sí, con la lencería adecuada y sus sandalias blancas de tiras preferidas, un par de Michel Vivien, le pidió de nuevo que le sacara el vestido, le dio la vuelta et voilà! Sabina supo entonces que era su vestido de novia ideal.

Apenas hicieron falta unas pequeñas modificaciones y el vestido vintage de John Galliano quedó listo para el gran día de la francesa. Su silueta lencera, sus detalles de encaje y ese halo tan noventero, fueron suficientes para enamorarla.

Para el maquillaje y el peinado optó por un look beauty muy natural que reflejase su aspecto diario y que por tanto, no pareciera que iba disfrazada y así estaba, radiante y guapísima con un vestido de novia de otra época. Una boda que hoy está dando la vuelta al mundo y que es ya el nuevo fenómeno viral en Instagram.